EL mismo día que los Diablos Rojos fueron eliminados en gran juego de 1-0 en la décima entrada en Saltillo se supo que Águilas de Mexicali no va a tener a Miguel Ojeda como manager en la próxima temporada invernal. Ojeda debutó este año como nuevo manager del México y sólo pudo terminar en cuarto lugar para tener el juego del comodín que cambió los planes en la utilización de los pitchers para el playoff.
El futuro de Ojeda con los Diablos no se sabrá seguramente hasta dentro de un buen rato pero se recuerda que cuando lo firmaron hace un año para tomar el lugar de Eddie Díaz al frente de la novena escarlata fue enviado como manager e instructor al equipo de Tepic, que es sucursal de la Liga del Noroeste. Fue entonces que Águilas de Mexicali pidió permiso a lo Diablos para llevarlo de manager y reemplazar a un Juan Francisco Rodríguez con el que no estaban contentos y Ojeda procedido a enderezar al equipo al que llevó al playoff, siendo eliminado por los Yaquis de Ciudad Obregón que iban en la búsqueda de un tercer campeonato seguido, que lograron.
Pero a pesar de su buen trabajo en invierno, no le renovaron el contrato. Ya en el verano se esperaba mucho más de los Diablos Rojos, el equipo que siempre es marcado para ganar el campeonato cuando arranca cada una de las temporadas, pero usted sabe todo lo que sucedió este año hasta la pesadilla que vivieron en el primer playoff al ser arrollados por Saltillo. Y como es normal, los aficionados se metieron fuerte con el manager al ver que se derrumbaba la gran muralla roja.
Generalmente los nuevos managers de los Diablos han durado por lo menos dos temporadas, aunque en el caso de "Houston" Jiménez en el 2005 y Eddie Díaz en el 2012 solamente estuvieron un año al timón.
Daniel Fernández fue el último manager en llevar al campeonato al Diablos en el 2008 después que lo habían preparado por varios años cuando ganó títulos con Tepic en la Liga del Noroeste, aunque sus problemas fuera del terreno de juego hicieron que los Rojos lo cambiaran por Mako Oliveras en el 2010. Oliveras llegó a la final en el 2011 pero la perdió contra los Tigres de Quintana Roo, el eterno rival.
