Al llegar al último mes de la temporada los equipos de invierno han comenzado a hacer cambios desesperados precisamente en el inicio de las ventas del "Viernes Negro", el Buen Fin americano, en que hay rebajas en todas partes. Los tricampeones Yaquis han decidido deshacerse de Karim García, al que lo quiere con desesperación Tomateros de Culiacán pero antes de realizar ese movimiento los mismos guindas adquirieron de Mexicali al campeón bateador de la Liga Mexicana, Luis Mauricio Suárez, quien sorprendió al mundo beisbolero al terminar con un gran porcentaje de .413.
Este invierno estaba con Águilas de Mexicali en que su bat debe haber sido congelado por el frío y llevaba sólo .221 con un jonrón cuando fue cambiado a los Tomateros que amanecen el Viernes Negro en último lugar de la segunda vuelta. Luis Mauricio debutó el viernes en Culiacán con una base y tres veces sin hit.
Al ser una liga tan corta el lema principal de invierno es aquel de que "camarón que se duerme se lo lleva la corriente" y no hay lugar para la paciencia. Otro problema es que llegan jugadores fuera de entrenamiento como le sucedió hace un año a "Cochito" Cruz, quien venía de un gran final de temporada con los Dodgers de Los Ángeles, que lo habían colocado como tercera base titular y se pensó que finalmente había llegado a Grandes Ligas para quedarse. Cochito, sin buen entrenamiento, fue a jugar con los Tomateros en invierno pero no pudo batear, teniendo que dejar el club. Se había convertido en un favorito de los aficionados angelinos y ahora, después de no poder batear con los Yanquis, se va al tan demandante beisbol de Japón en donde el único jugador mexicano que ha triunfado lo es Karim García, quien tuvo campañas de 29 y 26 jonrones aunque con averages de .266 y.255.
Vinicio Castilla me admitió que jugaba al final de la temporada invernal sin hacer un buen entrenamiento, pero claro, Vinicio es Vinicio, y aunque no daba los números que se esperaban de un gran bateador de la gran carpa, podía salir adelante.
Un caso idéntico al de Cochito hace un año lo está siendo esta vez el zurdo Fernando Valenzuela júnior, quien si bien comenzó dando un jonrón en su primer juego con Venados de Mazatlán, entró en una horrible racha en que no puede conectar un hit y su average ya bajó a .182. Le han tenido bastante paciencia a este muy buen bateador que, sin embargo, llegó sin el buen entrenamiento que se necesita antes de arrancar una nueva campaña. Debe ser un diciembre agitado ya que califican seis de los ocho equipos.