Un enorme frente de tormenta que comenzó en la región centro-norte y avanzó a través del país afectaba ayer jueves los estados de la costa atlántica con numerosos apagones e inundaciones repentinas, pero sin alcanzar las proporciones que se pronosticaban.
El área de Washington se prepara para las tormentas y el Servicio Meteorológico Nacional emitió varias advertencias en gran parte de la región.
Los meteorólogos dijeron que las tormentas podrían ocasionar vientos de gran peligrosidad y granizo grande, y que la amenaza no concluiría hasta horas de la noche del jueves.