Torreón escucha su 'Aullido'

Con la lectura de la obra Aullido, de Allen Ginsberg, se presentó ayer en el Teatro Isauro Martínez, el actor y director Diego Luna, acompañado del actor y guitarrista Jaime López, quienes durante la rueda de prensa comentaron que este proyecto surgió debido a que su director, Sergio Zurita, los convocó a realizar algunas lecturas del dramaturgo Baricco, a manera de monólogos.

Con esta lectura dio inicio el Festival de la Palabra Laguna Enriqueta Ochoa 2013, que este año celebra su segunda edición.

"Esto comenzó como una lectura pública. Pienso que el texto tiene un lenguaje muy coloquial que lo hace conectar muy fácil con el público; es casi como estar escuchando una rola de rap de poco más de cuarenta minutos".

Al respecto, Luna comentó que después de realizar el montaje de este trabajo escénico, él y Jaime López, la voz cantante, han estado ya en varias ciudades del país. "Estamos muy contentos de estar abriendo este festival en su segundo año, porque un esfuerzo por fomentar la lectura siempre es de aplaudir".

Diego recordó que en menos de un mes ya tenían listo el montaje de la lectura. Al hablar sobre los temas que le preocupan, el actor dijo que por fortuna no tiene que escoger uno solo, sino que va transitando de un proyecto a otro.

"En particular Aullido es un canto a la libertad, a la aceptación, es un canto al respeto, a celebrar las diferencias, es el descubrimiento y el grito de un autor que se reconoce como artista, como un ser imperfecto y que además sabe celebrar sus imperfecciones. Me parece muy pertinente para nuestro país leer Aullido; creo que México está viviendo ese hervidero, esa necesidad de explotar, de expresar, de conectarnos", mencionó.

Además, agregó que encuentros como el Festival de la Palabra celebran justamente eso; "Es encontrarnos y ver qué hay de nosotros en el otro para reconocernos en él o ella". También señaló que le entusiasmaba la idea de leer algo que emocionara al público, logrando que, al regresar a sus casas, las personas sintieran la necesidad de abrir un libro.

"Esto es algo que se debe hacer y promover en un país que lee tan poco como el nuestro". Diego comentó que leyendo Aullido recordó el encuentro que el teatro propicia con el público.

"Me regresó la necesidad de pararme en un escenario. Luego, con este tipo de lecturas pasa algo muy bonito, hay una interpretación de nuestra parte, además de que la obra nos presenta una visión distinta de la que nosotros podamos darle".

El director de la cinta Abel (2010), mencionó que realizar esta lectura fue como regresar a su infancia, cuando sus padres le leían. "Regresó a mí la sensación que experimentaba al escuchar las imágenes de las historias, para irlas hilando en mi cabeza. Es rico que te lean".

Emociones y descripciones de vértigo

Con unos acordes de guitarra de fondo y los actores Diego Luna y Jaime López, jugando pin pong, inició anoche en el Teatro Isauro Martínez la puesta en escena del texto de Ginsberg Aullido, una extensa crónica de la generación del "beat" y sus protagonistas.

López cantó el poema que recordó a las mejores mentes de esa generación, "aullar de cuchitril en cuchitril y de celda en celda entre luces de neón".

Del lado izquierdo del escenario, Luna en un escritorio frente a la máquina de escribir del poeta. Del lado derecho, López en una silla con guitarra en mano y los zapatos fuera de los pies; la escena una habitación para dar vida a uno de los textos más emblemáticos de una generación de poetas y escritores norteamericanos.

La lectura, literalmente un aullido de emociones y descripciones de vértigo. Por la transparencia del texto en la descripción de las escenas sexuales y de viajes de droga, varias personas que llevaron a sus hijos se empezaron a salir del teatro en los primeros diez minutos de la obra.

A pesar de la fama del actor Diego Luna, para muchos estuvo mejor Jaime López. Con su guitarra, elevó a un gran "beat" de jazz el discurso poético que le costó durante mucho tiempo la censura al propio Ginsberg.

Un teatro lleno. En los tres niveles del recinto sólo se percibían algunas pocas butacas vacías. Varias personas se quedaron por fuera del teatro, por lo que tuvieron que ver el espectáculo escénico en una pantalla instalada la entrada del TIM.

Al final la gente despidió emocionada a los artistas por un trabajo escénico de mucha exigencia, por lo largo del poema, aunque la mayoría del público asistió más por ver al actor que por acercarse al contenido de la obra.

¿Sabías Que...

la última vez que Luna estuvo en La Laguna fue el 12 de marzo de 2009, fecha en la que presentó en el Teatro Nazas la obra teatral El buen canario?