El niño Roberto “N” fue dado de alta, después de pasar tres semanas hospitalizado por la golpiza que recibió de siete de sus compañeros de la secundaria, que la hacían "bullying". Aún convaleciente en menor decidió que no volverá a esa escuela, revelaron sus familiares.
Roberto cursaba el primer grado de primaria, el último día que acudió a clases fue el 17 de octubre, fecha en la que alumnos de tercer grado lo golpearon en el exterior de la Secundaria Federal 1, porque se negó a fumar un cigarro, aunque antes lo habían amenazado y le decían que les caía gordo.
La Unidad 48 del IMSS confirmó que el paciente fue dado de alta la tarde del lunes, pero permanecerá en tratamiento con la posibilidad de que pueda reingresar a una cirugía.
El padre de Roberto, Santiago Hernández, señaló que su hijo no regresará a la secundaria pública en la que estuvo a punto de perder la vida. Una vez que Roberto se recupere por completo cursará la secundaria en otra institución, dijo su progenitor.
Comentó que su hijo deberá seguir un tratamiento prolongado, por semanas o meses, pero está contento, agradecido con Dios y con muchas ganas de vivir.
Roberto Hernández estuvo dos semanas en terapia intensiva con lesiones graves que ponen en peligro la vida a causa de múltiples golpes contusos.
Al niño se le diagnosticó perforación de intestino delgado, lesiones abdominales, contusiones internas, afectación en hígado y bazo.
Como consecuencia, la Agencia del Ministerio Público Especializada en Adolescentes integra una Averiguación Previa por el hecho delictuoso a la que han sido presentados dos alumnos de segundo grado de secundaria.
La Delegación regional de la Secretaría de Educación de Guanajuato (SEG) informó que su departamento de Consejería Legal acumula elementos sobre el caso de "bullying" para aportarlos a la fiscalía.