El tema de la falta de goleadores en nuestro futbol lo hemos tocado muchas veces. Y es que viendo partidos y sobre todo asistiendo por varios años a los entrenamientos, nos ha llamado la atención la falta de cuidado que se pone al renglón ofensivo del equipo.
Es que no todos los técnicos pasaron por los equipos como romperredes o goleadores, y los que lo hicieron están más preocupados en el funcionamiento general del equipo, como debe ser. Pero nuestro comentario dicho una y mil veces es el siguiente:
¿Cuándo en un equipo aparecen jóvenes con facilidad para anotar goles?, ¿por qué no se les atiende de forma especial, ya que por mil causas los dejan fuera a temprana edad, sin haberles tenido un poco de paciencia o ayudándolos a superar problemas personales?
La semana anterior hablábamos de cómo fueron alejando a varios jugadores de la cantera, a los que vimos muchas veces en prácticas y partidos anotando goles, como fueron los casos de Agustín Herrera, Gustavo Ruelas y Froylán Roldán. Podríamos mencionar muchos más.
Un buen día nos enteramos que no entraban en planes del técnico en turno y fueron enviados a otra parte para no volver. Así le pasó a Oribe Peralta, que lo enviaban a otros lares, aunque aquí sí hubo regreso y ya ve lo que resultó.
Usted platica con directivos y técnicos sobre el tema y le dan explicaciones cortas y cortantes, y ahí quedan arrumbadas y olvidadas muchas historias de jóvenes que fueron promesa y quedaron en eso.
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