En México el cáncer de mama es la primera causa de muerte en mujeres y el tumor más frecuente entre la población femenina en el país. (ARCHIVO)
Un grupo de expertos mexicanos desarrollan métodos para detectar el cáncer de mama en sus primeras etapas e incluso para conocer la predisposición genética a tener esa enfermedad, informó la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
Los estudios son desarrollados por especialistas del Instituto de Investigaciones Biomédicas (IIBm) de la UNAM y de Cancerología (INCAN), dentro del Programa de Investigación Biomédica en Cáncer de Mama.
Cynthia Villarreal, del INCAN, recordó que en México el cáncer de mama es la primera causa de muerte en mujeres y el tumor más frecuente entre la población femenina en el país.
El equipo encabezado por Carlos Larralde Rangel, investigador emérito del IIBm, trabaja en la identificación de anticuerpos asociados a los tumores de mama, para utilizarlos como método de diagnóstico al inicio de la enfermedad, incluso cuando el tumor es casi invisible.
El objetivo es "detectar marcadores (tumorales) en suero, pues quienes desarrollan cáncer de mama generan una respuesta inmunológica contra esas células tumorales, que pueden ser descubiertas a través de métodos sencillos" como la prueba Elisa, que sirve para detectar el VIH, dijo Luis Alonso Herrera.
Herrera, del programa de Investigación Biomédica en Cáncer, indicó que con una muestra sanguínea podrían localizarse alrededor de siete antígenos en cantidades pequeñas, cuyo patrón determina el grado de certidumbre del diagnóstico de un tumor.
A futuro, esos anticuerpos asociados a la enfermedad se utilizarán en programas de tamizaje (evaluación masiva para identificar el cáncer de mama en la población mexicana) con mejores resultados que las mastografías.
"Esa metodología aún requiere el estudio clínico y su validación, pero los resultados preliminares son prometedores, pues existen componentes de esa respuesta inmune específicos para tumores de mama", apuntó Herrera.
"Este método será una herramienta importante para que los médicos hagan una detección oportuna", destacó.
Sobre la prueba para detectar la predisposición a desarrollar este cáncer, el experto explicó que están estudiando las mutaciones de dos genes que controlan el crecimiento de tumores, BRCA1 y BRCA2, que "pueden ser marcadores predictivos de riesgo".
En las mujeres hispanas se han detectado cerca de 140 mutaciones muy frecuentes y su estudio ha generado un panel, llamado Hispanel, con el que se busca identificar cuáles son significativas para predecir el riesgo en la población mexicana.
"La predisposición no la podemos modificar, pero sí advertir a las pacientes que su vigilancia debe ser más estrecha y así adelantarnos al desarrollo" del tumor, apuntó en la víspera de la celebración del Día Mundial contra el Cáncer de Mama.
Este estudio puede tener un gran impacto en el costo de evaluación de riesgo de mujeres en México, pues en la actualidad el análisis de mutaciones en los genes BRCA 1 y 2 con secuenciación masiva cuesta 1,700 dólares y con este proyecto se reducirá a 50, resaltó la UNAM.
Villarreal, investigadora del INCAN, dijo que en México se diagnostican en promedio 15 casos por 100,000 habitantes al año pero aclaró que "es un sub-registro, pues no se cuenta con uno fidedigno que condense todos los casos nuevos".