La mexicana Sandra Ávila, conocida como "La Reina del Pacífico", pidió ayer a un juez federal retirar los cargos de narcotráfico que le imputa el gobierno estadunidense, pues la fiscalía incurrió en "falsedades" para su extradición de México, El abogado de la presunta narcotraficante mexicana, Stepehn Ralls, dijo que la petición hecha ante el juez Michael Moore se basa en que "la información dada al gobierno mexicano por los fiscales era falsa o sabían que era falsa cuando la Secretaría de Relaciones Exteriores dio la orden para la extradición".
Ávila Beltrán, fue extraditada desde México el pasado 9 de agosto y se declaró no culpable en un tribunal federal de Miami de los cargos de asociación ilícita para importar cocaína y asociación ilícita para distribuir la droga en EU.
Ralls explicó que la fiscalía basó su petición de extradición, entre otras pruebas, en una llamada telefónica interceptada por la agencia antidrogas estadounidense (DEA) en la que eventualmente participó su cliente.
"Esta es una interpretación en la que no se dice nada", sostuvo Ralls, quien admitió que en la conversación platican Juan López Correa, un informante del gobierno, Juan Diego Espinoza, novio de Ávila Beltrán, y la propia acusada.