La balconeada que le dio el jefazo del PAN, Gustavo Madero, al gober Rubén Moreira, hizo olas en el Pacto por México pero también en Coahuila, pues los blanquiazules recibieron una buena dosis de ánimo al ver que a su letárgico líder de repente le salieron pantalones. Dicen nuestros subagentes que la mención que hizo don Gustavo sobre el lanzamiento de los comités que formó el gobierno estatal para manejar apoyos sociales fue más una maniobra para consumo interno, pues el jefe panista necesitaba aplacar a los grupos que lo acusan de haber caído en los brazos del presidente Enrique Peña Nieto. Los subagentes comentan que fue el presidente estatal del PAN, Carlos Orta, el que le llevó a don Gustavo el chisme y las fotos del evento en el Coliseo Centenario en el que el gober Moreira es aclamado por cientos de personas. Con esta evidencia, al dirigente panista se le ocurrió la puntada de exhibirlo en su discurso ante don Enrique durante la firma del acuerdo para blindar programas sociales, porque sabía que de otra forma no lo iban a pelar.
Esto quedó demostrado con la denuncia que luego presentó el curuleco del Movimiento Ciudadano, Ricardo Mejía, contra don Rubén por delitos electorales pero que no tuvo tanto impacto mediático como el desplante del panista, lo que comprueba una vez más que en este país es más efectivo el periodicazo que la justicia. Puede ser, como acusó el alcalde Eduardo Olmos, que los panistas se “escandalizaron”, pero también es cierto que era fácil asustarse con el evento del Coliseo porque los azules debieron pensar que habían regresado los tiempos gloriosos de Humberto Moreira, a quien le encantaban estas cosas. El episodio sirvió para motivar a los panistas de Coahuila a buscar evidencias de más travesuras priistas con programas sociales. Se dice que andan detrás de funcionarios del programa Oportunidades que condicionan estos apoyos a cambio de votos para el PRI. Huelga decir que los del PAN tienen muy buen olfato para estas maniobras electoreras pues ya tienen experiencia de cuando ellos mismos lo hacían el sexenio pasado, pero ahora los papeles se han invertido.
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Otro que resultó sorprendido por el desplante de Gustavo Madero fue el propio presidente Enrique Peña Nieto, a quien la denuncia del panista lo agarró desprevenido porque pensaba que ya habían “planchado” la bronca por el uso electoral de programas sociales. Nuestros subagentes cuentan que cuando don Gustavo mencionó el caso de Coahuila, el “preciso” le mandó miradas de desconcierto al dirigente del PRI, César Camacho, y al secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio. En una reunión privada después, don Enrique le habría dicho al líder panista que se tomaría en serio el asunto de Coahuila. No se sabe si de Los Pinos o Gobernación ya hablaron al Palacio Rosa a jalar orejas, pero nuestros subagentes comentan que la molestia en el Gobierno Federal no fue el fondo sino la forma, pues el gober Rubén Moreira habría olvidado al clásico de Jesús Reyes Heroles, que decía que con frecuencia son lo mismo. O sea, el problema no fue la creación de los “Compas” sino la forma tan aparatosa en que lanzaron el programa, con todos los operadores uniformados con camisas rojas, como si fuera evento del PRI. Parece que al secretario de Desarrollo Social, Rodrigo Fuentes, no le pasó por la cabeza la idea de que eso se iba a ver con suspicacia. Don Rubén, por su parte, tuvo que pasar aceite porque apenas una semana antes se había congratulado de lanzar medidas para “blindar” programas sociales. Aunque ya se sabe que aquí el interés electoral mata todo, como sucedió el año pasado con la reforma para poner candados al puesto de Secretario de Desarrollo Social y prohibir el nombramiento de personas que hubieran ocupado o fueran a buscar un puesto de elección popular. La reforma fue echada a la basura para abrirle el camino al hoy suspirante del PRI a la alcaldía, Miguel Ángel Riquelme, lo cual comprueba que cualquier blindaje puede ser perforado inmediatamente.
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Nuestros subagentes en el cuartel de campaña del suspirante panista a la alcaldía, Jesús de León, reportan que el fantasma de Jorge Zermeño ya fue “exorcizado” y confían en que el frente interno no les representará más problemas, luego de las fricciones que hubo en la elección de candidato. Se dice que hubo una “operación cicatriz” adentro del PAN y los únicos cuadros que no han sido alineados son los más cercanos al exalcalde, pero no serían problema porque carecen de capacidad de operación. Una señal de que don Jorge ya se habría resignado a quedarse sin prospecto laboral en la grilla lagunera se dio en las redes sociales. Los subagentes que navegan el Internet cuentan que la esposa del exalcalde, Astrid Casale, publicó en su cuenta de Facebook un mensaje anunciando que en la próxima elección no votaría por don Chuy sino que pondría el nombre de su esposo en el espacio en blanco de la boleta porque, de ser candidato, don Jorge “hubiera ganado abrasadoramente”. Curiosamente es que el comentario desapareció de la cuenta poco después de haberse publicado, lo que llevó a algunos grillos panistas a preguntarse si don Jorge habría optado por no hacer más olas. ¿Será?
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Mientras que el Estado y el Municipio siguen prometiendo (pero sólo eso) la inversión en infraestructura de hospedaje industrial para atraer más empresas, algunos interesados en el potencial económico de la Comarca Lagunera parecen dispuestos a irse por la libre y no esperar más. Nuestros subagentes comentan que hay empresarios foráneos vinculados a desarrolladores de parques industriales privados que han puesto el ojo en algunas zonas donde se podría hacer la inversión en hospedaje que el gobierno no quiere hacer. Estos empresarios habrían establecido ya contacto con algunos “ipecos” laguneros para analizar algunos proyectos, sin esperar a que se cumplan las promesas. Y es que, apuntan los subagentes, si van a esperar, mejor que lo hagan sentados, cómodos y en la sombrita porque eso de la inversión pública en infraestructura va para largo. Pero el problema no necesariamente sería de dinero, o al menos eso se desprende de un comentario muy revelador que uno de nuestros subagentes escuchó el otro día. Según el reporte, un exfuncionario del gobierno estatal que ahora cobra en la nómina federal, dijo hace poco que el fondo del asunto no era financiero sino de voluntad política para empujar los proyectos de atracción de inversiones y que esa voluntad ha estado ausente, pues simplemente no existe. Lo cual explica muchas cosas.
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Como se recuerda, hace dos meses el gober de Durango, Jorge Herrera Caldera, armó tremendo borlote para presentar su informe de gobierno y hasta se llevó a decenas de invitados al puente Baluarte para presumirles lo que (supuestamente) hizo su administración en 2012. El evento fue magno y provocó la admiración de los asistentes y una cobertura intensa. Hasta aquí todo muy bien, pero uno de nuestros subagentes reporta que hace unos días buscó el documento del informe para sacar algunos datos no lo encontró por ningún lado en Internet. No está ni en el portal del gobierno del Estado ni en la página personal de don Jorge. Lo único que se encontró fueron tres ligas mencionando el informe, pero las páginas a las que conducen se encuentran vacías, lo cual llama mucho la atención porque no checa que la presentación del informe haya ameritado tanta alharaca si el documento no se puede leer. Puede ser que como las páginas que supuestamente contienen el documento están vacías es precisamente porque el informe está vacío de contenido, pero algunos mal pensados sugieren mejor buscarlo en la página de la Presidencia Municipal de Durango, porque ya se sabe que el gober Herrera ha sido el mejor alcalde de la capital.
