Sigilosamente Luis Fernando Gallardo sacó por la puerta de atrás sus pertenencias la semana pasada y dejó de ocupar el cargo de director de informática del Ayuntamiento de Torreón. Cuentan nuestros subagentes que muchos de los empleados del Municipio se enteraron de este movimiento porque de un día para otro desaparecieron de la oficina de Gallardo todos sus “juguetes” de Feng Shui. A pesar de la tranquilidad que buscaba por medio del incienso, la verdad es que al enterarse de la noticia muchos burócratas brincaron de gusto, y es que el joven Gallardo ya los tenía hasta el chongo con sus malos tratos y altanerías que en nada se parecen a la filosofía del Feng Shui.
Luis Fernando se hizo famoso en esta administración por apretar el botón y “apagar” el sistema cuando más gente había pagado el predial u otros impuestos, todo con el objetivo de hacerle la vida imposible al tesorito Pablo Chávez Rossique, de esta forma los ciudadanos pagaron por cuatro años las consecuencias de los enfrentamientos de estos funcionarios. El nombre de Luis Fernando Gallardo también estuvo involucrado con ciertas travesuras cometidas en el catastro en complicidad con quién fuera su titular, Roberto Flores, donde movían el software para obtener beneficios económicos…bueno eso afirman las malas lenguas. Don Roberto ya también entregó el changarro y dejó de cobrar en la sagrada nómina así que los alegres compadres dejaron la administración a pocos días de que llegara a su fin.
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Tras la salida de Luis Fernando Gallardo de informática, a quien por cierto también le gustaba “hackear” los celulares de los reporteros incómodos, Luis Campos se ha hecho cargo de las computadoras y las conexiones de red. A quien fuera director de informática con Salomón Juan Marcos Issa los trabajadores municipales lo definen como una fina persona, cuyos modales contrastan mucho con su antecesor también conocido como el “Chanoc” Gallardo. Algunos afirman que don Luis Campos será el próximo director de informática y por eso ya anda aprendiendo donde se mueven los cables, sin embargo lo cierto es que el alcalde electo, Miguel Riquelme, mantiene en secreto el nombre de sus futuros colaboradores y sólo ha anunciado al tesorero, Enrique Mota, Jorge Luis Morán como secretario de Ayuntamiento, Renata Chapa como directora de Cultura y a Jesús Sotomayor como director jurídico.
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Cuentan nuestros subagentes que en las próximas semanas iniciará el proceso de expulsión en el PAN de aquellos militantes que colocaron espectaculares y realizaron campaña a favor de Jorge Zermeño cuando el candidato para la alcaldía de Torreón era Jesús de León. Los dardos apuntan principalmente a Gerardo Montañez, quien se dijo excolaborador de José Ángel Pérez y mandó a colocar, según él sin la ayuda del PRI, espectaculares a favor del exembajador justo una semana antes de la jornada electoral que finalmente ganara el hoy alcalde electo, Miguel Riquelme. Así que los tambores de guerra ya están sonando al albiazul, sobre todo cuando en el pasado Consejo Estatal celebrado el domingo en Saltillo el diputado federal Guillermo Anaya logró colocar a varios integrantes de su grupo político en el Consejo General del PAN, ahí está Chuy de León, Marcelo Torres, Javier Gómez, Natalia Virgil, quienes seguramente buscarán cobrar venganza contra quienes anduvieron de traviesos promocionando la figura de Zermeño, quien por cierto no se dio la vuelta a la Asamblea de este domingo.
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Y hablando de la asamblea del PAN cuentan nuestros subagentes disfrazados de palmeras que la gran decepción en dicho evento fue el protagonizado por el grupo Torreón debido a que no alcanzó quórum por exceso de confianza y una mala operación del grupo de Guillermo Anaya, al menos eso afirman las malas lenguas. Don Memo había encargado esa chamba al ex candidato Chuy de León y al diputado Marcelo Torres, quienes quedaron mal pero lograron salvar el pellejo porque finalmente el grupo Torreón salió victorioso ocupando las más importantes posiciones y el mayor número de votos porque otro lagunero como el ex diputado Luis Alberto Mendoza y que juega del lado de la senadora Silvia Garza Galván sacó muy pocos votos.
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Y en Gómez Palacio los empresarios ya no saben a que santo rezarle para que el gobierno de Durango les envíen los recursos provenientes del ISN, con los cuales se iba a mejorar el Parque Industrial. Los empresarios afirman que Valentín Pérez, líder del Centro Coordinador Empresarial no ha exigido la devolución de los recursos porque está más interesado en quedar bien con el gobernador, Jorge Herrera. Incluso los molestos empresarios afirman que don Valentín trabaja como “oreja” del CISEN de Durango y le pasa todos los chismes al gober. Por cierto don Valentín Pérez lleva nueva años representando a los empresarios y en todo este tiempo se le ha “olvidado” convocar a elecciones ¿porqué será?
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¿De casualidad usted ha escuchado el nombre de Víctor Morales? Pues este personaje que no es tan famoso lleva, desde los tiempos de Octaviano Rendón, cobrando en la sagrada nómina de Gómez Palacio. Entre sus chambas está el haber sido Responsable de la administración Recursos Humanos, Jefe de Departamento de Servicios Generales y Jefe de Oficina de Asistencia Social y desde los tiempos de Rocío Rebollo fungió como director de Ingresos, puesto en el que repitió y se ha convertido en la pesadilla de los comerciantes por los impuestos que les quiere cobrar por un anuncio en la fachada. Calladito, calladito, don Víctor ha sabido cumplir la máxima de que vivir fuera del presupuesto es vivir en el error y por lo visto él siempre ha estado en el camino correcto para no soltar la liana, lo de menos son los resultados y atender a la ciudadanía, ya ve usted que fue de los primeros que tomó el camión para irse a la inauguración de la autopista Durango-Mazatlán.
