El homicidio del periodista Jaime González Domínguez en Ojinaga, Chihuahua, el pasado 3 de marzo, demuestra que la violencia continúa limitando el acceso a la información, lo que pone en grave riesgo a las personas que ejercen el periodismo en México, denunció Amnistía Internacional.
La organización señaló que estas acciones de intimidación en contra de medios de comunicación interfieren directamente en la cobertura de noticias, sobre todo aquellas relacionadas con crimen organizado y de violencia.
Como ejempló citó el caso del portal “Ojinaga Noticias”, de cobertura local en esa ciudad del estado de Chihuahua, que horas después de informar sobre el asesinato de González Domínguez, anunció la suspensión de sus servicios informativos.
Esta y otras agresiones, señaló la organización, “han ocurrido gracias a la casi total impunidad que protege a los agresores”.
En un comunicado, Amnistía Internacional exigió a las autoridades una investigación efectiva, pronta e imparcial sobre el asesinato de González Domínguez, quien el pasado domingo fue asesinado en calles de esa ciudad fronteriza por al menos 18 impactos de arma de fuego.
Luego de la agresión, sus atacantes también le robaron una cámara fotográfica.
En los últimos años, México, dijo, se ha convertido en uno de los países más peligrosos del mundo para ejercer el periodismo, como lo reconocen numerosas organizaciones internacionales.
“La organización también solicita a las autoridades que brinden adecuadas condiciones de seguridad y protección a otros periodistas de la región”, agregó.