En las próximas semanas quedarán definidos los principales contendientes a las presidencias municipales de la zona conurbada de La Laguna. Algunos ya han sido "destapados", mientras que otros aún pelean las postulaciones.
Es natural que en estos momentos los aspirantes estén concentrados en armar sus bases de apoyo dentro de los partidos. Pero es necesario que los candidatos comiencen a pensar en sus plataformas de gobierno y en la necesidad de ampliar sus visiones más allá de los límites municipales.
La Laguna está ante el escenario inédito de renovar sus autoridades municipales de manera simultánea en los estados de Coahuila y Durango. Por primera vez las administraciones locales pueden arrancar con el mismo impulso para buscar soluciones a problemas comunes.
En la Comarca Lagunera hemos atestiguado durante décadas la falta de comunicación entre los distintos gobiernos estatales y municipales, que se ha agudizado en los últimos años cuando la región ha enfrentado una dura época de inseguridad y violencia, y las autoridades no han estado a la altura de una respuesta integral y articulada a este enorme reto.
En las últimas semanas este tema ha cobrado relevancia al quedar expuesta la incapacidad para coordinar una reacción efectiva, incluso después del cambio de gobierno federal. La falta de comunicación entre los gobernadores Rubén Moreira y Jorge Herrera y de los alcaldes de la zona conurbada, así como de sus subordinados, ha derivado en una serie de reclamos que cruzan el Río Nazas sin contribuir a resolver el problema de la inseguridad.
Pero la seguridad no es el único tema en el que urge una comunicación entre autoridades. Abasto de agua, movilidad, desarrollo urbano, homologación de reglamentos de tránsito, alcoholes o giros negros, son otros asuntos en los que cada municipio de la región lagunera ha tomado acciones por su cuenta, en algunos casos radicalmente diferentes entre sí.
También ocurre que cada parte de la región ha seguido los dictados de sus gobiernos estatales cuando en las capitales no consideran las características de una conurbación.
Los candidatos a alcaldes que competirán en las elecciones del 7 de julio están obligados a definir sus plataformas de gobierno con base en criterios metropolitanos y en una mejor integración de los municipios. Los habitantes de la zona metropolitana dan todos los días el mejor ejemplo de que la convivencia urbana trasciende fronteras del mapa. Merecen que sus alcaldes hagan lo mismo.