Sin trabajo. La mayor parte de los jóvenes realizan manifestaciones por la falta de trabajo en las principales ciudades italianas. (EFE)
La tasa de desempleo en Italia llegó en el primer trimestre de este año al 13.6 por ciento de la población económicamente activa, lo que significó un alza de 0.8 por ciento respecto al mismo periodo de 2013, informó ayer una fuente oficial.
Según el Instituto de Estadísticas (Istat) de Italia, ese nivel representó un máximo histórico desde que en 1977 se comenzaron a publicar los datos trimestrales.
Asimismo, el Istat indicó que en los primeros tres meses de 2014 la tasa de desempleo de los jóvenes de entre 15 y 24 años de edad alcanzó el 46 por ciento, lo que también constituyó un nuevo máximo histórico.
La entidad precisó que en el primer trimestre de este año el número de desempleados fue de tres millones 487 mil personas, lo que representó un aumento de 212 mil en relación con el mismo periodo de 2013.
Según el Istat, la tasa de desempleo en abril fue del 12.6 por ciento, el mismo nivel que en marzo, pero 0.6 puntos porcentuales más alta en comparación con el mismo mes del año pasado.
Señaló que en el sur del país la tasa de desocupación llegó al 21.7 por ciento en el primer trimestre de 2014 y entre los jóvenes de 14 a 24 años de edad se ubicó en 60.9 por ciento.
A nivel nacional, el Istat indicó que en el primer trimestre de 2014 llegaron a 2.5 millones los jóvenes de entre 15 y 29 años que no estudian, ni trabajan, lo que significó un aumento de 113 mil (4.8 por ciento) en relación con emismo periodo de 2013.
"Estamos tocando el fondo", declaró el presidente de los industriales, Giorgio Squinzi, al comentar las cifras del desempleo.
La secretaria general de la Confederación General de Trabajadores Italianos (Cgil), la principal gremial del país, Susanna Camusso, consideró que se trata de "datos muy graves" y llamó al gobierno a ya no razonar en términos de recortes de puestos de trabajo.
PROTECCIÓN SOCIAL
Por su parte, la Organización Internacional del Trabajo (OI) urgió a los estados a invertir más en protección social integral, pues a nivel mundial los gobiernos asignan sólo 0.4 por ciento del PIB a las prestaciones familiares y para los hijos.
El gasto en ese rubro oscila de 2.2 por ciento en Europa Occidental a 0.2 por ciento en África y Asia/Pacífico, y deberían de ser incrementadas si se considera que cada día mueren unos 18 mil niños, que en su mayoría son evitables a través de una protección social adecuada.
