Ataques. Desplazados miran desde lejos los ataques que se suscitan en distintos bastiones del Estado Islámico.
Luego de 10 semanas de haber iniciado una guerra contra el grupo Estado Islámico, el Pentágono se prepara para mantenerla a largo plazo, con pocos logros importantes en su arranque, pero contando aún con enlistar a sirios e iraquíes para que combatan por tierra y no sean los soldados de Estados Unidos quienes tengan que hacerlo.
El general estadounidense que supervisa la campaña el viernes pronosticó que los yihadistas serán "muy degradados" por los ataques aéreos dentro de un año, en parte debido a que centra sus bombardeos en los recursos que permiten al EI mantenerse y reabastecer a sus militantes.
El viernes, por ejemplo, el ejército estadounidense informó que uno de sus seis bombardeos nocturnos en Siria hicieron blanco en varios tanques de almacenamiento de combustible del EI y una estación de bombeo -lugares que son clave para la capacidad de los extremistas de reabastecer a sus fuerzas y generar ingresos_.
Asimismo, informó que dos ataques aéreos de la coalición en Irak causaron daño o destruyeron blancos militares del EI cerca del disputado pueblo de Beiji, hogar de la mayor refinería del país.
En su primer resumen público de la campaña que encabeza desde la sede en Florida del Comando Central de Estados Unidos, el general del ejército Lloyd Austin advirtió que no debe esperarse un progreso inmediato. Añadió que no puede predecir cuánto tiempo tomará enderezar un flojo ejército iraquí y crear una viable fuerza terrestre de la oposición en Siria.
Ataque de coalición mata a 8 del EI
Un ataque aéreo de la coalición internacional encabezada por EU contra un centro de distribución de gasolina en un bastión del grupo Estado Islámico desató una serie de explosiones que mataron a por lo menos menos ocho personas en el este de Siria, dijeron activistas el sábado. El ataque ocurrió en el pueblo de Khasham, en la provincia de Deir el-Zour, dijo Deir el-Zour Free Radio, un grupo de activistas, en Facebook. El grupo nombró a cuatro de los muertos y dijo que otros cuatro cadáveres calcinados fueron colocados en una mezquita cercana. Dijo que los muertos eran mayormente choferes de camiones cisterna. Otro grupo de activistas, Deir el-Zour Network, describió "largas lenguas de fuego" provocadas por el ataque, que fue reportado por el Observatorio Sirio de DH, con sede en Gran Bretaña, pero que depende de activistas en Siria.