Atención. La prevención, indican expertos, es clave para frenar una tendencia cada vez más crítica.
En México, 25 por ciento de las familias tiene un integrante con algún tipo de trastorno mental, es decir, una de cada cuatro familias, advierte la OMS.
Tales números superan por varios puntos porcentuales a países simliares a México y su población.
Durante el Neurocongress 2014, Carlos Baños, Director General de Eli Lilly México, apuntó que evaluar el impacto de las enfermedades mentales es clave para incrementar la detección oportuna de estos padecimientos y acelerar el inicio de un tratamiento adecuado.
En el país, este tipo de padecimientos se encuentran entre las principales causas de pérdida de vida saludable y funcional en jefes de familia entre 30 y 50 años de edad. Y de acuerdo con Baños, una persona puede tardar entre 4 y 20 años en buscar atención médica especializada.
De entre las diez enfermedades más frecuentes y de alto costo entre la población, al menos cuatro son de tipo mental, como la depresión, según la OMS.
De acuerdo a diversos estudios, los trastornos se deben a una variedad de asuntos, pero los más recurrentes es una tendencia a la depresión.
A su vez, el mexicano es proclive a trastornarse por las ausencias de bienes o de afecto, en gran medida exponenciado por la tendencia de consumismo y los rompimientos familiares, ambos cada vez más frecuentes entre todos los estratos sociales mexicanos.
"Es un teme que las autoridades de salud y en general el gobierno debe atender apoyado en expertos, pues a la larga esto tiene tendencia a empeorar, y en lugar de lamentarlo hay que buscar la forma de remediar en cuanto aún es posible", apuntó el experto Baños.
