'Arañan' el título
Joffre Guerrón despierta a la final. Partido de nulo espectáculo, pero a la medida de Ricardo Ferreti. Ese 1-0 que tanto le gusta a "Tuca" para venir al Estadio Azteca a imponer un cerrojo que le dé a los Tigres la corona del futbol mexicano.
Un cabezazo cruzado que dibujó un arcoiris a la portería de Moisés Muñoz. Bella estampa que pone contra las cuerdas al americanismo, que por una remontada ante su gente. Las Águilas tendrán que apelar a la épica tal y como lo hicieron en el Clausura 2013 ante el Cruz Azul. Duelo que vendrá a la memoria de los fans amarillos para aferrarse a la ilusión de coronarse.
El Estadio Universitario explota. Se levanta del letargo con el rugido de gol (63'). Guerrón, colocado como centro delantero, aprovecha una escapada de Damián Álvarez, quien centra. Su pase hacia la frente del atacante felino. Cuando el esférico va a las redes, Tigres se siente cerca de su cuarto título.
"Oe, oe, oe, oe, Guerrooón, Guerrooón", corean los asistentes al 'Volcán'. Saben que un gol de su equipo es cosa rara de ver. Máxime en una final. Lo celebran con todo, su optimismo porque su club se borde otra estrella aumenta exponencialmente en las tribunas.
Ferreti tratará de apagar el ímpetu americanista en el Coloso de Santa Úrsula. Está en su terreno. La defensa es su fuerte: los regios tienen tres partidos con el cero en su meta. El reto de las Águilas será poder volver a encontrar el futbol ofensivo que extrañan.
Primer tiempo que se lleva a cabo conforme al plan del "Empatuca" y el "Empaturco". Intensidad, lucha, mucho roce, falta de ideas y una que otra ocasión desperdiciada. América busca el contragolpe, mientras que los Tigres van al ataque, pero sin desordenarse atrás. Los felinos arriesgan poco y se nota. Quieren ganar en un golpe de talento, se quedan en el intento.
Cada vez que pierden la pelota, ambos se interrumpen. Prueba de esa estrategia de choque es que salen amonestados Jesús Dueñas, por los felinos, y Jesús Molina, Osvaldo Martínez y Oribe Peralta, por las Águilas. Capitalinos y regios no se dejan muchas opciones. Cuando dejaron resquicios, sus porteros aparecieron.
La primera mitad pasó con uno que otro contratiempo, pero nada que no pudieran salvar de acuerdo con su jerarquía. Nahuel Guzmán y Moisés Muñoz tapan embates que realmente van a sus manos. Tampoco realizan acciones sobrehumanas. Los disparos llevan poco peligro. Los presentes no se desesperan, como si estuvieran acostumbrados a que sean tacaños los Tigres con el espectáculo.
Tampoco Mohamed hace mucho para que América se note muy agresivo. Se resguarda, no envía muchos elementos al ataque. Ante la ausencia de Rubens Sambueza, Miguel Layún es quien trata de desequilibrar. El emplumado es apretado y pocas veces puede crear.
Con los balones parados, las Águilas tampoco descifran al cerrojo de Ferreti en el campo.
Las faltas son un testimonio de lo que sería la final. Ingenuo aquel quien pensó que la serie por el campeonato del Apertura 2014 brindaría un tributo al espectáculo o sería memorable. Lo de ayer fue un timo al espectador, quien pagó de 2 mil 500 hasta 3 mil pesos por un boleto.
"Va a ser un juego trabado; el que anote el primer gol va a ser el que tenga más opciones de ser campeón", avisó el "Turco" acerca de la final por el título.
Tigres lo hizo en una segunda mitad igual de intensa y áspera. Rasguña el título con el cabezazo de Guerrón. La serie está en el terreno de "Tuca", quien está acostumbrado a dormir a los espectadores, con tal de llevar a su equipo a dar la vuelta olímpica.
América tiene el reto de resquebrajar a los norteños, hasta ahora invictos en la Liguilla, si quiere saciar su obsesión por la 12.
Los felinos dieron el primer rasguño de la final.
TÍTULOS
De liga ha ganado el América, para ser uno de los más ganadores en México.