Los asesinatos de miles de civiles afganos por las fuerzas militares de Estados Unidos y sus aliados siguen impunes, pese a evidencias de que muchos de ellos constituyen posibles crímenes de guerra, apuntó ayer Amnistía Internacional (AI). El organismo de derechos humanos asentó que miles de afganos han muerto o fueron heridos por fuerzas de Estados Unidos y de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) desde que comenzó la invasión, sin que los responsables hayan sido llevados a juicio. En un informe, AI afirmó que las víctimas y sus familias tienen escasas posibilidades de obtener justicia.