La NSA experimenta una ola de críticas por su forma de operar y filtrarse a través de diversos servicios de telecomunicaciones para obtener información privada. (ESPECIAL)
Los rumores sobre la intromisión de la Agencia Nacional de Seguridad (NSA) en sistemas de comunicación de todo el planeta van en aumento.
Estas acusaciones se consolidaron tras la difusión de información clasificada que proporcionó Edward Snowden, un exagente de la CIA y de la misma NSA.
Según el estadounidense, la NSA opera de determinada manera para inmiscuirse en los sistemas de seguridad de las compañías telefónicas más importantes del mundo y así, poder tener acceso a información privada de millones de personas.
Snowden explica que la NSA trabaja a través del proyecto 'AURORAGOLD' bajo dos preceptos:
1) El primero de ellos es, desde luego, espiar líneas telefónicas aprovechando las vulnerabilidades cibernéticas de las empresas proveedoras del servicio.
2) La segunda estrategia y quizás la más polémica, es que al adentrarse en los servidores sus agentes provocan intencionalmente otras vulnerabilidades sin dejar rastro y así, en un futuro poder filtrarse de nuevo con ayuda de esa misma vulnerabilidad generada.
Así, la NSA se asegura de que en cualquier momento puede meterse a una línea telefónica sin importar que el proveedor fortalezca su seguridad, pues dejó un 'hueco invisible' en sus servidores.
Según datos que circulan en la web, el 70% de la información obtenida por la CIA y la NSA es obtenida gracias a su intromisión en dispositivos móviles, esto incluyendo líneas teléfonicas y aplicaciones como Facebook.
