Cinco israelíes murieron en el atentado contra la sinagoga de Kehilat Bnei Torah, que acabó con los dos autores palestinos abatidos por agentes del orden. (EFE)
El presidente ruso, Vladímir Putin, dijo hoy que el atentado perpetrado el martes en una sinagoga de Jerusalén y que se saldó con cinco muertos traspasó todos los límites.
"El último crimen sangriento en Jerusalén, donde la gente que oraba fue atacada con hachas, eso ya es una situación más allá de los límites", dijo el líder ruso durante una sesión del Consejo de Seguridad nacional.
Cinco israelíes murieron en el atentado contra la sinagoga de Kehilat Bnei Torah, que acabó con los dos autores palestinos abatidos por agentes del orden.
"La vida no nos ha dejado de dar nuevas lecciones y, aunque aparentemente están lejos de nuestras fronteras, las debemos tomar en consideración", declaró Putin, citado por agencias rusas.
Y agregó: "Somos conscientes del peligro de las manifestaciones (de violencia) de este tipo. Debemos tomar a tiempo las decisiones que preserven a nuestro país de cosas como esa".
Además, el jefe del Kremlin advirtió sobre las "irreversibles" consecuencias de la propagación de las ideas extremistas para un país multinacional como Rusia, por lo que llamó a "erradicar" cualquier brote extremista que puede provocar un conflicto étnico, social o religioso.
