'Atora' conflicto legal Zona de Conectividad

Hace casi siete años la Zona de Conectividad se planteó como el más ambicioso proyecto para el desarrollo económico de la Comarca Lagunera, pero éste no ha prosperado debido al conflicto legal que surgió de la disputa por los terrenos.

Casi desde entonces, se promovió un juicio que aún está vigente y que no ha resuelto el problema entre Luis Garza, quien se ostenta como el presidente de la Zona de Conectividad y las hermanas Genoveva y María Garza de la Mora.

Durante la administración municipal de Ricardo Rebollo Mendoza se concretó el concepto de dicha Zona, partiendo de que su ubicación sobre la carretera Gómez Palacio-Jiménez resultaría estratégica a partir de la operación de la súper carretera Durango-Mazatlán, la cual conecta ya a nuestro país con los océanos Pacífico y Atlántico, con La Laguna como punto intermedio.

Aunque los terrenos se han ofrecido a la venta y hubo algunos intentos de varias empresas por instalarse en ese lugar, desistieron tras la incertidumbre generada por la disputa familiar. Inicialmente se dijo que ese sector estaría conformado por empresas de gran calaje que además de devolverle a esta ciudad su vocación industrial, repuntarían la actividad económica y los empleos en toda la región.

En la superficie de la Zona de Conectividad se localiza la Aduana Interior de Gómez Palacio, que semanas atrás inició operaciones como una extensión de la Aduana de Torreón y con características de puerto seco, pero sin contar todavía con un Recinto Fiscalizado Estratégico.

Según Luis Garza, la operación de la sección aduanera es muy independiente del proyecto que apuntaba a convertir toda esa zona de Gómez Palacio en un enorme parque industrial; aseguró que la idea se mantiene vigente a pesar del conflicto por la propiedad de las tierras.

A su vez, regidores que integran la Comisión de Desarrollo Económico plantearon la necesidad de aclarar el estado que guarda dicho proyecto y las posibilidades reales de que se instalen nuevas empresas en el área.