Además. Aurora Bernárdez, era la albacea de la obra de Cortázar y su viuda.
El mundo de la literatura dijo adiós este fin de semana a Aurora Bernárdez, la viuda y albacea literaria de Julio Cortázar que además de dejar traducidas al español obras de Italo Calvino o Albert Camus, fue la responsable de cuidar la obra del autor de "Rayuela" editando sus libros póstumos y su correspondencia.
Hija de padres gallegos, Bernárdez nació en Buenos Aires el 23 de febrero de 1920. Fue en esta ciudad donde estudió Letras en la Universidad de Buenos Aires (UBA) y se licenció en Literatura.
Fue en esta época estudiantil cuando conoció a Julio Cortázar en la capital argentina y en la década de los 50 contraen matrimonio, y se instalan en París, ciudad donde ambos vivieron algunos de los mejores y más fructíferos años de la vida del escritor.
Se trata de una época en la que se fraguó la amistad con el escritor Mario Vargas Llosa, quien el pasado año en presencia de la propia Bernárdez durante los cursos de verano de la Universidad Complutense, recordó la sensación que tuvo cuando conoció al matrimonio en París.
"De mi primer encuentro con ellos -relató Vargas Llosa- recuerdo, sobre todo, la manera en cómo se convirtieron en los protagonistas de la noche. Había entre ellos una complicidad, una inteligencia...
Eran maravillosos conversadores, se tenía la impresión de que esa conversación no era espontánea, que había sido ensayada previamente para impresionar a los otros contertulios".
La que ha sido traductora de Lawrence Durrell, Gustave Flaubert, Italo Calvino, Vladimir Nabokov, Albert Camus, Jean-Paul Sartre y William Faulkner, entre tantos otros, nunca escribió obra propia.
Algo a lo que nunca ha querido dar respuesta, como dejó claro durante una visita a Madrid.