Sorpresa. El actor Neil Patrick Harris sorprendió con presentación, pues fue caracterizado de su personaje de transexual.
Con un saltarín Hugh Jackman como anfitrión, la ceremonia de los premios Tony no logró superar a la emisión del año pasado en cuando a índices de audiencia.
Según cifras preliminares difundidas el lunes por Nielsen, la transmisión del domingo por CBS en la que A Gentleman's Guide to Love and Murder se coronó como mejor musical de Broadway tuvo un promedio de 7.02 millones de espectadores, frente a los 7.24 millones de 2013.
Aun así fue la segunda mejor teleaudiencia para los Tony en los últimos cinco años.
Neil Patrick Harris, quien por años fue anfitrión de la velada, le cedió el control a Jackman en esta ocasión. Harris, con el atuendo de transexual que usa como protagonista del musical Hedwig and the Angry Inch, bailó sobre el regazo de Sting y lamió las gafas de Samuel L. Jackson.
La emisión coincidió con un partido de finales de la NBA entre San Antonio y Miami, a lo cual se le atribuye el descenso de los índices de audiencia.
