En su defensa frente a la acusación del órgano interno de control de Pemex de haber incumplido con los montos requeridos de fianzas para garantizar contratos, Oceanografía presumía de tener activos por dos mil millones de dólares y una flota de 80 barcos de última generación. No había, pues, necesidad de pichicatear recursos.
Lo cierto es que la mayoría de las naves con las que presumía de ser invencible a la hora de pelear en licitaciones, eran rentadas. Más aún, las dos de mayor calado, es decir, el OSA Goliath, refutado como el mayor barco carguero del planeta, y el Caballo Marango, estaban empeñados.
Registrado en Singapur, el primer coloso fue colocado en garantía por un bono de deuda de 335 millones de dólares, cuyo vencimiento llegaría en el 2015, además de otro de 115 millones, con vencimiento éste en septiembre del 2018, colocándose como fiduciaria a la empresa noruega Norks Tillistmann por más que el valor del navío era de 215 millones.
El pago de principal e intereses fue omitido a partir de diciembre del año pasado, por lo que se declaró en default a la firma.
Como usted sabe, la empresa noruega, en afán de recuperar de lo perdido lo que aparezca, ordenó al barco tomar proa hacia su país para evitar su incautación por el gobierno mexicano, con la novedad de que estaba cargado de tubos propiedad de Pemex.
La emisión se pactó con una inaudita tasa de interés de 12 por ciento, en cuyo atractivo no se reclamaba mayor precisión en los estados financieros de la compañía emisora.
Lo grave del caso es que ésta no era la única deuda que tenía frente a sí la empresa cuyo control asumió el Servicio de Administración y Enajenación de Bienes. Además de los préstamos de 585 y 33 millones de dólares que le otorgó Banamex, existen al menos 10 emisiones de deuda más por un total de 650 millones de dólares.
La paradoja del caso es que a pesar de la gran cantidad de contratos que recibía de Petróleos Mexicanos, la firma solicitaba uno y otro préstamos… sin que liquidara los pendientes, empezando por el pago de las rentas de los barcos y siguiendo con los salarios de los trabajadores.
De hecho, ya salió a la palestra uno de los empresarios a los que se liga con la empresa encabezada por Amado Yáñez Osuna, Javier Rodríguez Borgio, para señalar que seis barcos de la firma son de su propiedad… y desde el año pasado no se le paga la renta.
En el caso de Banamex, el escenario se complica ante el reclamo de los acreedores de no haber evitado que los recursos que le otorgó a Oceanografía fueran derivados a otros fines.
De hecho, el programa en que se había inscrito Oceanografía con el aval de la empresa pública exigía que el dinero que se otorgaba con garantía de facturas por pagar fuera con cargo al pago de proveedores.
El contrato de factoraje apuntaba a evitar problemas de caja de las empresas contratistas frente a eventuales retrasos en los pagos por la maraña burocrática interna.
La única explicación pública es que el director general de la compañía, dueña del 26 por ciento de las acciones de ésta, se enredó con la participación de la empresa en negocios ajenos a su vocación.
Así la empresa Libertad, Servicios Financieros, derivada de la caja de ahorros Libertad, la más grande del país, cuyo presidente hasta hace unos días era Martín Díaz Álvarez, quien había llegado como socio a Oceanografía, según ello para reestructurar sus finanzas.
Así los equipos de futbol "Gallos Blancos" de Querétaro y "Delfines" de Ciudad del Carmen.
El emporio que facturó durante los sexenios panistas más de 46 mil millones de pesos, resultó la pura fachada. Barcos rentados o pignorados, otros propiedad de terceros a quienes se les permitía aprovechar los contratos de la firma a cambio de un porcentaje, y una gran cantidad de deudas.
¿En dónde quedó la bolita?
BALANCE GENERAL
Lanzada a los cuatro vientos la especie de que la siderúrgica Ternium firmó un contrato de largo plazo para servicios de carga con la empresa Ferromex, propiedad del Grupo México de Germán Larrea Mota Velasco, lo que en el papel desmentía a la Cámara Nacional de la Industria del Hierro y el Acero sobre lo prohibitivo de las tarifas, hete aquí que ésta lo está negando.
Ninguna empresa siderúrgica del país ha establecido contratos de largo plazo con las compañías ferroviarias, dice.
Como usted sabe, el organismo se ha constituido como la piedra en el zapato para que el Senado dé marcha atrás a la minuta aprobada por la Cámara de Diputados en aprobación de una reforma a la Ley Ferroviaria que permite la competencia contra la propia Ferromex y Kansas City Southern.
La instancia denunció que las firmas duopólicas mantienen una campaña de desinformación.
Según Ferromex, Ternium México había firmado un convenio que le permitiría la asignación de una flota de mil 300 góndolas a sus servicio, con una inversión de mil 660 millones de pesos.
CUOTA FIJA
Aunque la Comisión Federal de Competencia les abrió una rendija para entrar al mercado derribando algunas de las barreras colocadas por el duopolio: Heineken-AB InBev, los fabricantes de cervezas artesanales se quejan de trato inequitativo por parte del fisco.
El Impuesto Especial sobre Productos y Servicios que se les cobra es 70 por ciento más alto al que se le impone a las firmas hegemónicas.
Estamos hablando de mil pesos por hectolitro a la cerveza fabricada rudimentariamente, frente a 300 para las marcas producidas en serie.
La meta de la Asociación de Cerveceros de la República Mexicana que los agrupa es que se imponga una cuota fija.
Más allá, el organismo plantea presionar más acciones de la hoy Comisión Federal de Competencia Económica para alcanzar una apertura total.
Las firmas, además, quieren internacionalizarse.
La industria que labora a nivel artesanal produjo el año pasado 95 mil hectolitros de la bebida, 36 por ciento más que en el 2012.
La membresía se duplicó el año pasado al pasar de 22 a 43 marcas en el mercado.
El objetivo es alcanzar el uno por ciento del pastel.
LÍOS DE HOSPITAL
Ubicado en la zona más exclusiva de la ciudad de México, el hospital Biosphera, propiedad de la Inmobiliaria Paseo de las Lomas que encabeza Carmela Azcárraga de Burillo, enfrenta problemas con sus socios.
De hecho, desde el 2006 no se han realizado asambleas generales, pese a requerimientos actuariales.
La sociedad se integró en junio del 2005 bajo el marco del Instituto de Atención Integral y Bienestar. Sin embargo, en un acto que se califica de ilegal la administración del inmueble ubicado en Prolongación de Paseo de la Reforma se le entregó a la Promotora de Hospitales y Servicios Integrales, que opera con la razón social "Hospital Bite Médica".
En el pleito se ubica un juicio mercantil bajo el expediente 13/2010 radicado en el juzgado 50 de lo Civil del DF, bajo el cual se reclama que se expidan las acciones correspondientes a quienes aportaron recursos para la creación de la sociedad original.
NADA DE NADA
Aunque la Procuraduría General de la República les manifestó a los dirigentes de los tres sindicatos de Mexicana de Aviación que está vivo el interés por capturar al expresidente de la línea aérea, Gastón Azcárraga Andrade, las evidencias señalan que el caso se diluyó ante el escándalo de Oceanografía.
Hay quienes juran y perjuran que el también expresidente de la cadena de hoteles Posadas está viviendo en San Diego, California.
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