Elementos de la Secretaría de Seguridad Pública del Distrito Federal (SSPDF) adscritos a la Unidad de Protección Ciudadana (UPC) Roma detuvieron a tres hombres por su presunta responsabilidad en el robo de joyas y una computadora portátil de dos domicilios en la delegación Cuauhtémoc.
La SSPDF informó, a través de un comunicado, que las víctimas denunciaron que al encontrarse dentro de su hogar, localizado sobre el Eje 3 Sur Baja California, casi esquina con Altata, en la colonia Hipódromo, un individuo tocó la puerta con el pretexto de entregar un paquete de mensajería para un integrante de la familia.
Sin embargo, al momento que la propietaria abrió la puerta ingresaron violentamente varios sujetos y uno de ellos amenazó a la víctima con un arma de fuego para que les mostrara el lugar donde guardaban las joyas y los objetos de valor.
Mientras los ladrones amagaban a una de los habitantes, una persona que estaba en la planta alta del inmueble escuchó lo sucedido y se encerró en una de las habitaciones, desde donde pidió auxilio a través del número de emergencias 066.
Por estos hechos acudieron policías de Proximidad, a bordo de las patrullas P24-12 y P24-09, pero al escuchar el sonido de las sirenas los delincuentes subieron a la azotea y brincaron hacia otra casa, de donde robaron una lap-top.
Luego de realizar un dispositivo de búsqueda en la zona los agentes advirtieron que el grupo de asaltantes salía del inmueble ubicado en calle Altata y lograron asegurar a quienes dijeron llamarse Héctor Eduardo García Carrera, de 22 años de edad, Óscar Torres Valtierra, de 25, y Jonathan Ortega Mendoza, de 23.
Durante la revisión que se hizo a los detenidos, los oficiales encontraron dentro de dos bolsas de plástico las joyas y la computadora robadas, además de que uno de los agresores guardaba en su pantalón las llaves de un automóvil Nissan Platina, gris, placas MPZ-6674 que estaba estacionado frente a la casa asaltada.
Los uniformados pusieron a los detenidos a disposición de la Agencia del Ministerio Público de la Coordinación Territorial de Seguridad Pública y Procuración de Justicia CUH-2, donde las víctimas de ambas casas los reconocieron plenamente como los responsables del asalto.