Las complicaciones que se presentan en la economía mundial podrían inhibir el desempeño de la actividad productiva mexicana. Existe el riesgo de que el desplome de los petroprecios afecte las finanzas a pesar de las coberturas, aseguró el Centro de Estudios Económicos del Sector Privado (CEESP).
Aunque la producción de la manufactura estadounidense mejora y es un incentivo para la industria mexicana, existe el problema de que esa aceleración solamente se registre en unos cuantos sectores, y "no es suficiente para hacer que el ritmo de crecimiento económico (de México) se acelere en el corto plazo".
En el Análisis Económico Ejecutivo, el CEESP afirmó que la caída de los precios del petróleo hace menos atractiva la participación de los inversionistas en proyectos de hidrocarburos lo que limitará los beneficios esperados de la reforma energética, además de que inhibirá el fortalecimiento de las finanzas del país. "El mercado petrolero se está convirtiendo en un factor que puede tener una incidencia negativa en el desempeño de la economía. De continuar la baja de los precios internacionales del petróleo, como lo anticipan los expertos internacionales, los ingresos públicos podrían verse afectados a pesar de las coberturas contratadas por la Secretaría de Hacienda y de la depreciación del tipo de cambio", afirmó el CEESP.
SITUACIÓN COMPLICADA
Para que las reformas estructurales tengan un efecto positivo sobre la economía nacional deben ser implementadas correctamente y se necesita reforzar el Estado de Derecho y alcanzar el potencial de la economía del 4%, estima BBVA Bancomer.
Carlos Serrano, economista en jefe, comentó que "estamos en un entorno global complicado", que ha afectado la economía nacional este año.
Se ubicó la mezcla mexicana de petróleo.
Baja crudo mexicano 2.28 dólares
La mezcla mexicana de petróleo de exportación retrocedió 2.28 dólares respecto al cierre previo, al ofertarse en el mercado internacional en 56.70 dólares por barril, de acuerdo con Petróleos Mexicanos (Pemex). Bursamétrica refiere que los crudos marcadores registraron el nivel más bajo de los últimos cinco años, entre otros factores por presiones ante el recorte de precios de Irak a los mercados de Asia y EU. A ello se sumó la disminución para las estimaciones del precio del crudo Brent en 2015 y los riesgos de desaceleración económica en China y la eurozona. Así, el precio del Brent perdió 2.60 dólares, al ubicarse en 66.27 dólares por tonel, mientras que el West Texas Intermediate (WTI) perdió 2.88 dólares para situarse en 63.05 dólares por barril.
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