Obligaciones. Tras la Reforma Financiera, deberán consultar y reportar a alguna de las sociedades de información crediticia.
Lejos de representar una ventaja para los usuarios, la proliferación de casas de préstamo puede representar un riesgo debido a los altos intereses que cobran.
Francisco Esparza Hernández, delegado estatal de la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicio Financieros (Condusef), señaló que actualmente dichas instituciones son las que representan la segunda mayor carga de trabajo para la dependencia federal, sólo detrás de los bancos que representan el 50 por ciento de las atenciones.
De las casi 20 mil atenciones ofrecidas por la Condusef durante 2013, cerca del 30 por ciento fue a usuarios de casas de préstamo que buscaban ayuda ante la imposibilidad de pagar sus deudas con esas instituciones.
"Es un porcentaje considerable y en un ratito se va a emparejar con los bancos porque están creciendo las Sofomes que se dedican a créditos o préstamos de dinero en efectivo (...) y esas son las que más existen", dijo.
NO SE CUMPLIÓ
Explicó que con la aprobación de la apertura de las casas de préstamo, bajo el concepto de Sociedad Financiera de Objeto Múltiple (Sofom), se pretendía originalmente que éstas representaran una opción segura y accesible de financiamiento para las personas de bajo nivel económico.
Esto bajo la expectativa de la competencia entre instituciones, tras la apertura de más de cuatro mil Sofomes a nivel nacional, previendo que ofrecieran intereses más bajos que cualquier otra institución financiera.
"Desafortunadamente no ha sido así, los intereses son muy altos. Es cierto, el interés lo cobran de acuerdo al riesgo que tienen por el dinero que prestan sin garantía o aún con avales sin garantía", precisó el funcionario federal.
