Apunta el viejo refrán que "más vale un mal arreglo que un buen pleito".
Pero en Sonora pareciera que prefieren lo contrario a decir del encontronazo registrado entre el gobierno de esa entidad y el gobierno federal.
Las pugnas se agudizaron a raíz de la grave contaminación del río Sonora por las fallas técnicas de la mina Buenavista del Cobre, situada en la histórica población de Cananea, aunque las desavenencias ya venían desde la operación del acueducto Independencia.
A más de un mes del derrame de 40,000 metros cúbicos de sulfato de cobre sobre la vertiente del río, autoridades estatales, federales y la minera propiedad del Grupo México no se han puesto de acuerdo en la solución del problema.Para colmo la empresa propiedad de la familia Larrea no ha dado la cara a la comunidad afectada al tiempo que el gobierno federal sigue sin actuar con la celeridad y la energía necesarias.
El presidente Enrique Peña Nieto anunció en una reciente entrevista que se aplicará el peso de la ley en contra del Grupo México, sin embargo hasta el momento sólo se han realizado acciones aisladas sin que la autoridad obligue a la minera a resolver esta severa crisis ambiental.
En medio de tan enrarecido panorama, el gobernador Padrés fue acusado a través de un reportaje en Televisa de construir una presa en su rancho Pozo Nuevo y de almacenar agua en perjuicio de los agricultores de la región de Bacanuchi.
En respuesta el mandatario de Sonora solicitó la destitución de los delegados de Conagua, Profepa y Sagarpa, por haber señalado en el reportaje la ilegalidad de la obra hidráulica sin haber investigado antes la denuncia.
Demandó además la renuncia del Procurador Federal de Protección al Ambiente, Guillermo Haro, por su "irresponsabilidad" al no haber actuado oportunamente en el caso de los derrames de la minera.
En un desplegado, Padrés Elías solicitó la ayuda del presidente Peña Nieto en la solución del desastre ecológica del Río Sonora al tiempo que señaló como responsables de esta crisis al Grupo México y a los funcionarios federales antes aludidos.
La respuesta no tardó en llegar. Ayer miércoles, en el mismo día del desplegado, el vocero presidencial Eduardo Sánchez rechazó las acusaciones de Padrés y conminó al gobernante a redoblar esfuerzos y a colaborar con la Federación.
Sánchez sostuvo que es facultad exclusiva del Presidente de la República el nombramiento y permanencia de los delegados federales y no del gobernador. El mensaje fue directo aunque en la misma conferencia el titular de Profepa, Guillermo Haro, tuvo que salir al paso en torno a la crisis del derrame de la mina en Cananea.
Para rematar el director general de Conagua, David Korenfeld, anunció que se inició la investigación sobre la supuesta presa del rancho de Padrés para saber si cuenta con los permisos de construcción y con los requerimientos legales. En caso contrario, precisó, se clausurará la obra y podría en su momento ser destruida.
Hasta aquí la relación de los hechos en este choque de trenes en donde desgraciadamente los más afectados son los 22 mil habitantes de la cuenca del río Sonora que han sido dejados al garete.
Lo cierto es que la Federación tuvo que aclarar los cargos del gobernador Padrés por lo que seguramente pronto sabremos en dónde terminará este sainete.
¿Se pactará un "mal arreglo" luego de tan "buen pleito" o por el contrario se llegará hasta las últimas consecuencias en las investigaciones de uno y otro bando?
APUNTES FINALES
Mientras se acercan las elecciones intermedias del mes de noviembre en Estados Unidos, crece la preocupación por la poca efectividad del presidente Barack Obama en atender los conflictos de Siria, Irak y Ucrania, entre otros… El mandatario norteamericano ha perdido el liderazgo y firmeza mostrados en su primer periodo de gobierno en política internacional.
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