Los grifos, las perillas y las palancas no deben tocarse directamente, mucho menos el asiento del inodoro, para lo cual puede utilizarse papel como protector. (ARCHIVO)
Experimentar la necesidad de ir al baño y utilizar el más cercano, aunque sea público, puede convertirse en un problema de salud futuro debido a las infecciones que puedes contraer.
Según detalla el periódico español ABC, el doctor Héctor Guerrero del Centro Médico Gran Vía, alerta que micrococos y corynebacterias, relacionadas con patologías de la piel; estreptococos, vinculados con problemas en el tracto digestivo; enterobacterias, y pseudomonas que afectan el tracto urinario, son algunos de los principales microbios que habitan en los baños públicos y que pueden afectarte.
No obstante, acciones sencillas pueden ser tus mejores aliadas para no contraer infecciones.
Entre estas se encuentran no usar el papel higiénico si estuvo en contacto con el suelo y de preferencia llevar siempre uno propio.
Los grifos, las perillas y las palancas no deben tocarse directamente, mucho menos el asiento del inodoro, para lo cual puede utilizarse papel como protector.
Siempre debes lavarte las manos con agua y jabón exclusivamente líquido y secarte las manos con la secadora, nunca con toallas de tela o papel.
Finalmente, al momento de salir del baño es importante no utilizar contacto directo para abrir o cerrar la puerta, sino protegerse con papel higiénico para evitar la recontaminación.
