Secos. En la casa de Juanita Contreras lucen los depósitos de agua, los cuales son rellenados a diario.
En el ejido Gabino Vázquez del municipio de Viesca, las llaves y las regaderas se encuentran de adorno. Con la llegada del calor, el agua potable se fue, situación que viven desde hace años. Incluso ni los recibos de cobro llegan por la misma situación.
El titular del Simas Rural, Juan Pablo Flores aseguró que el problema de desabasto se debe a una descompostura en un motor del sistema de rebombeo, el cual se repararía en esta misma semana. Los habitantes aún esperan que así sea.
Mientras tanto, Juanita Contreras seguirá llenando sus dos tinacos y un tanque de 200 litros para abastecer su casa y cubrir sus necesidades.
No luce molesta, sino acostumbrada al problema que asegura, tiene años presentándose en esta comunidad.
Comenta que a diario una pipa acude hasta esta comunidad rural para abastecerlos de agua.
"Ya ni nos cobran el agua, el recibo ni llega", dice doña Juanita, quien recuerda que mensualmente, cuando el agua salía en sus llaves, pagaba cerca de 62 pesos.
Aunque los depósitos lucen llenos de arena en el fondo, Juanita dice que así es como la utilizan, sobre todo cuando va a lavar o regar las plantas.
Dice que el bañarse en la regadera es sólo un recuerdo en este ejido, pues desde el mes de marzo, cuando las altas temperaturas comienzan en este lugar, el agua se va y no regresa, sino hasta después del mes de septiembre.
"Cuando hace frío sale poquita agua en las llaves, pero sólo hasta entonces", dice Juanita.
A las afueras de su vivienda lucen los dos tinacos y el tanque de 200 litros, pero no es la única casa que luce de esta manera.
Y es que al realizar un recorrido por esta comunidad, se pudo observar que en la gran mayoría se encuentran los grandes depósitos en espera de ser rellenados.
Los vecinos de este lugar como Juanita, esperan que en esta ocasión sí se resuelva su problema de desabasto como informaron las autoridades.
Problema
En Gabino Vázquez:
⇒ No hay agua en tiempo de calor.
⇒ Tinacos, tinas, tanques y otros depósitos adornan las viviendas en espera de ser rellenados.