Cereso. En el Cereso se encuentra Eliza Irquiza Hernández, acusada de infanticidio.
Eliza Urquiza Hernández, de 44 años de edad, se encuentra internada en el Centro de Reinserción Social (Cereso) de la ciudad de Durango desde el 31 de julio del año pasado; se le dictó auto de formal prisión por el delito de infanticidio, pero las autoridades federales ya le concedieron un amparo contra esta orden porque el juez penal estatal no se apegó a los tratados internacionales de derechos civiles ni a la perspectiva de género.
El 14 de julio del 2013, Eliza cursaba su octavo mes de embarazo y en ese tiempo nunca tuvo la atención médica, por lo que nunca fue revisada por un doctor. La clínica más cercana se encontraba ya en el estado de Chihuahua; ella vivía en el poblado Hacienda de Providencia del municipio de San Bernardo.
Ese día, haciendo las labores del hogar, decidió llevar basura en una carretilla hasta una distancia de más de 500 metros; al llegar y levantar la carretilla, por el esfuerzo realizado, expulsó a su bebé, quien nació muerto.
El 23 de ese mismo mes llegaron elementos de la Dirección Estatal de Investigación (DEI) y le pidieron al Juez de Cuartel del poblado que exhumara el cadáver del bebé y acudieron con Eliza, a quien le hicieron firmar un acta que no le permitieron ver.
Lamentablemente la mujer, de entonces 43 años, no revisó lo que estaba firmando porque en el acta aparecía que ella había visto moverse y respirar a su bebé cuando nació y no le dio los tratamientos correctos dejándolo morir.
El 31 de julio, el Juez Tercero del Ramo Penal con sede en Gómez Palacio dictó el auto de formal prisión en contra de Eliza por el delito de infanticidio.
Los familiares de Eliza, quien tiene otros cuatro hijos, buscaron la ayuda y acudieron a un grupo de abogados y a la organización social "Sí hay Mujeres en Durango", quienes de forma inmediata trabajaron en el caso y verificaron que en el expediente que realizó el agente del Ministerio Público nunca apareció el motivo de la muerte del bebé porque el médico forense nunca lo dictaminó. Además demostraron que la Fiscalía General del Estado nunca realizó la prueba científica para ver si en los pulmones de la bebé hubo aire.
Se solicitó un amparo contra, pero las autoridades judiciales de la ciudad de Durango se declararon incompetentes y trasladaron el caso a Gómez Palacio, donde pasó la misma situación, por lo que lo turnaron hasta la ciudad de Torreón, Coahuila, donde la autoridad se excusó argumentando que tenía mucho trabajo y lo envió a Saltillo, Coahuila.
El 21 de enero de 2014, el juez Primero de Distrito del Centro Auxiliar de la Décima Región con sede en Saltillo concedió el amparo indicando omisiones por parte de la Fiscalía General de Durango.
PRIMER AMPARO DE SU TIPO EN EL PAÍS
Julieta Hernández Camargo, dirigente de "Sí hay Mujeres en Durango", dijo que este amparo es el primero en su tipo en todo el país porque la autoridad judicial federal parte de la interpretación de que hubo discriminación por parte de las autoridades sólo por el simple hecho de la humildad en que vivía Eliza y de que es mujer.
