Las ENM son una causa frecuente de morbilidad pediátrica, porque afectan los componentes de la unidad motora del cuerpo, pero muchas veces son desdeñadas o minimizadas por los médicos, mal diagnosticadas o mal tratadas, lo que suele agravarlas. (ARCHIVO)
El jefe de Medicina de Rehabilitación del Hospital Civil “Fray Antonio Alcalde”, José de Jesús González Jaime, señaló que las Enfermedades Neuromusculares (ENM) pueden ser confundidas con deficiencias alimentarias.
Añadió que las ENM son una causa frecuente de morbilidad pediátrica, porque afectan los componentes de la unidad motora del cuerpo, pero muchas veces son desdeñadas o minimizadas por los médicos, mal diagnosticadas o mal tratadas, lo que suele agravarlas.
Indicó que a la consulta infantil un alto porcentaje de niños son llevados por sus padres al ver que sus hijos no logran sostener la cabeza, no ruedan, no gatean o no hacen las mismas actividades que otros niños de su misma edad o sus hermanos mayores.
“Con respeto a mis colegas, muchos de ellos tienen la creencia de que se trata de problemas de tipo nutricional, la falta de alguna ‘vitamina’, señalan que ‘no todos los niños son iguales’ o que se trata de ‘niños flojitos’, pero desconocen que se trata de las ENM”, afirmó.
González Jaime, quien también es el coordinador del Módulo de Rehabilitación del XVI Congreso Internacional de Avances en Medicina (CIAM 2014) que se realizará del 27 de febrero al 1 de marzo, comentó que las ENM no son muy comunes pero el impacto de quienes tienen este problema es muy importante.
“En términos generales se dice que hay 100 niños con ENM por cada 100 mil habitantes, y en adultos la cifra puede variar, ya que puede haber un enfermo por cada cinco o 20 mil habitantes”, precisó.
Alertó que el tiempo de presentación y de evolución de este tipo de enfermedades es distinto, y puede tratarse de problemas de las neuronas motoras, de los nervios periféricos, de la unión neuromuscular o enfermedades de los músculos.
Dijo que cada una de las ENM tiene síntomas muy característicos, con pronósticos muy diferentes, algunos favorables, en los que los pacientes pueden llegar a su plena curación, mientras que otros pueden llevar cursos variables e incluso conducir al término de la vida en pocos años, como la atrofia espinal, de dos a tres años.
“Los niños con enfermedad de Duchenne pueden vivir entre 20 y 30 años o los adultos con esclerosis lateral amiótrica, cuyas expectativas de vida son muy pobres”, dijo.
Lo importante, resaltó González Jaime, es el diagnóstico oportuno y la intervención con un equipo multidisciplinario. “Atendemos al mes dos o tres casos de este tipo de enfermedades”.
Comentó que especialistas de diferentes partes del país analizarán y capacitarán a los médicos en este tema durante el CIAM 2014, que cada año organiza el Hospital Civil de Guadalajara y la Universidad de Guadalajara.
