La mitad de los empleados no se sienten respetados por sus jefes. Lo anterior es una conclusión de un estudio de más de 20 mil empleados alrededor del mundo, realizado por Tony Schwartz de la Universidad de Harvard. Cuando se habla de compromiso y entrega de parte de los empleados hacia la empresa en donde laboran, hay algo que los líderes deben demostrar a sus subordinados: respeto.
Ninguna otra característica del comportamiento del líder mostró tanta influencia durante el estudio realizado. El ser tratado con respeto resulto más importante para los empleados que el reconocimiento, el aprecio, la buena comunicación, la visión inspiradora, la buena retroalimentación e incluso las oportunidades de desarrollo, de aprendizaje y de crecimiento
Quienes en el estudio reportaron tener respeto por parte de sus líderes, presentaban mejor salud y bienestar en un 56 % y también 1.72 veces más confianza y seguridad, 89 % disfrutaban más de su trabajo, el 92 % estaba más enfocado en sus responsabilidades y percibían 1.26 veces más significado e importancia en sus actividades laborales que el resto de los empleados. Quienes dijeron ser respetados por sus líderes también mostraron 1.1 veces más tendencia a permanecer en la empresa comparados con quienes no se sentían respetados.
El respeto tiene una influencia directa en el grado de compromiso de los empleados. Entre más respeto den los líderes, más alto es el nivel de compromiso de los empleados. Quienes se sienten respetados están 55 % más comprometidos con la empresa que quienes no se sienten así.
Desafortunadamente, más de la mitad de los empleados entrevistados en el estudio (54 %) reportaron no tener regularmente respeto por parte de sus líderes. La falta de respeto de los líderes hacia sus subordinados conduce inevitablemente a un menor compromiso, más rotación, menor enfoque y menor productividad y más altos costos de salud. Para saber por qué a los empleados no se les muestra respeto por parte de sus líderes, se investigó al respecto a un buen número de líderes y el 60 % contesto que se debía a sobrecarga de trabajo que no les permitía ser amables y respetuosos con los empleados. Esta respuesta tiene poco fundamente ya que no se requiere tiempo adicional para ser respetuoso y amable. Por lo general, el tono y la comunicación no verbal inadecuada es lo que hace a los empleados sentir la falta de respeto.
El 25 % de los líderes que no respetan a sus subordinados dijeron que lo hacían así porque carecían de un modelo en la organización que les inspirara a ser respetuosos por lo tanto, se comportaban así porque ese era el comportamiento de los líderes en toda la organización. Estos estudios demostraron que la falta de respeto por los demás se hace de manera inconsciente por parte de los líderes, no se dan cuenta cabal de ello. Solamente un 4 % de líderes masoquistas dijeron que su falta de respeto era divertido y los hacía sentirse bien. La mayor parte de la gente no se da cuenta que está afectando a otros con su falta de respeto, pueden tener buenas intenciones con los empleados, pero fallan en reconocer la forma en que son percibidos por lo demás.
Los líderes deben mantener en mente que el respeto es diferente para diferentes personas. El respeto va ligado directamente a lo que cada persona espera y a lo que los líderes hacen sentir a cada persona. Las normas son diferentes de acuerdo a la cultura, el género y la generación, así como al tipo de empresa.
Prácticamente todos quienes experimentan incivilidad en su lugar de trabajo o que no se sienten respetados en el mismo, responden a ello de manera negativa. Son menos creativos y más dispuestos a emigrar. La mitad de ellos disminuyen sus esfuerzos en el trabajo y lo realizan con una calidad menor y también se refleja y daña las relaciones con los clientes. Los resultados del estudio mostraron que la gente es menos propensa a comprar en un negocio o empresa en donde perciben que los empleados son tratados con rudeza.
Los líderes en las empresas deben promover una cultura de respeto, reclutar y contratar personal civilizado dispuesto a ser respetuoso. También requieren ser ellos mismos modelos de civilidad y evaluar en todos el factor de civilidad en las evaluaciones de desempeño como un factor clave para la buena marcha de la empresa.
Los líderes necesitan corregir el mal comportamiento, el propio y el de los demás. Los empleados descorteses e irrespetuosos deben ser advertidos acerca de su mal comportamiento, además de darles instrucciones muy claras de cómo mejorar. Un comportamiento irrespetuoso debe ser corregido de inmediato. Después de todo, el respeto hacia los demás paga buenos dividendos.