El pasado mércoles 12 de febrero, la conocida periodista Lupita Sordo Murguía de la Colina, creadora y conductora por años del interesante programa televisivo "En Confianza", por el que la reconoce y congratula todo Acapulco, nos presentó en Sala Delfos una película cuyo guión fue escrito por su madre, Isaura Murguía y producida por su padre, el muy famoso hombre de Radio Alonso Sordo Noriega, quien creó XEX, la estación de mayor alcance en América Latina en su momento, cuya historia está escribiendo Lupita. Roberto Gavaldón dirigió el film y en él aparecen, lógicamente jóvenes y guapos, conocidos actores del cine mexicano, con los siempre agradables y buenos actores Soler, Gustavo Rojo y Lilia Michel, como pareja romántica.
La película tiene aristas que muestran a la sociedad de la época, las modas, la invasión del "swing", las residencias ricas, los pleitos entre muchachos de diferentes clases sociales que finalmente se unen, las costumbres en suma, así como la forma de ser y pensar de un México irreconocible.
Pero algo que es muy importante desde el punto de vista histórico de esta cinta bien hecha, es que como expresó Lupita, le fue solicitada a su padre Don Alonso Sordo Noriega por el presidente Manuel Ávila Camacho (1987-1955) quien ejerciera el cargo de 1940 a 1946. El último presidente militar o viceversa. La II Guerra Mundial había terminado el 8 de mayo de 1945 en Europa con la entrada de los soviéticos a Berlín y la rendición incondicional de Alemania. En Asia terminó el 15 de agosto de 1945 tras lo siniestros bombardeos atómicos de Hiroshima y Nagasaki en Japón
El presidente y general Ávila Camacho, un hombre de Puebla y de derecha, sucedía, no lo olvidemos, a Lázaro Cárdenas de Michoacán, también general, pero de izquierda y profundamente nacionalista que en 1938 expropió el petróleo. Asimismo abrió el país a todos los grupos que huían de la guerra en Europa que fueran, rojos españoles o judíos perseguidos por el Nazismo. La apertura de su pensamiento, que compartían los intelectuales mexicanos de entonces, le permitía inspirarse ¿por qué no? en ideas socialistas. "Comunismo", decían los mochos de todas las religiones.
Curiosamente en 1939, después de la expropiación del petróleo, se formó Acción Nacional, un partido de derecha, y según decires del momento, originalmente patrocinado por las compañías extranjeras expropiadas, que juraron - y cumplieron hoy - " ¡Volveremos!".
La película "Corazones de México" se hizo, como explicó Lupita Sordo de La Colina, para apoyar el lanzamiento del servicio militar obligatorio en México, en momentos de guerra mundial como los que se habían vivido. Y el argumento gira alrededor de ello. Nada que ver con el militarismo revolucionario, ya muy visto. Ahora los "conscriptos" son jóvenes soldados modernos (todos, pequeño error, blancos o mestizos claros), uniformados y entrenados como gringos, pero con el amor a la patria mexicana. Y bailan "swing" con sus chicas…
En cierto momento de la película, sin mucho acento y hasta como de paso, aparece una foto del barco petrolero "El Potrero del Llano", que iba cargado de barriles para Estados Unidos, según cierta info, y fue partido en dos y hundido presuntamente por un submarino alemán el 13 de mayo de 1942. Murieron 14 mexicanos entre marinos y gente del recién recuperado ámbito del petróleo. El barco que había tenido otros nombres antes, ahora portaba el de un rico campo petrolero veracruzano. Llevaba todas las luces prendidas para que se vieran sus banderas. Y valió gorro. Es un poco sospechoso que haya al respecto una información detalladísima de los nombres y grados de todos los oficiales alemanes que tripulaban el submarino U-Boote en cuestión. Circula por otra parte, la versión de que los que lo hundieron fueron los gringos para pararle al coqueteo de los mexicanos con los alemanes.
Ese acontecimiento y otros cinco hundimientos de barcos mexicanos en 1942 relacionados con el petróleo ("Faja de Oro", el "Tuxpan", "Las Choapas", el "Oaxaca", el "Amatlán") obligó a México a entrar en la II Guerra al lado de Estados Unidos, dejando atrás la neutralidad a la que en cierto modo se aferraba, porque, la neta, México era bastante germanófilo y lo demostraba el hecho que los 15 de septiembre de aquellos años aparecían por doquier banderitas con la suástica. Al parecer hoy también, curiosamente, y hoy también las compañías vuelven a primera fila al haber recuperado el petróleo de México. A eso se deben las portadas lambisconas de sus revistas.
En fin, estoy yendo demasiado lejos en los pensamientos que me despertó la película "Corazones de México". Pero ahí queda para la reflexión sobre la historia real de este país y que investigue más el que se interese.
Agradezcamos a Lupita Sordo y a su hijo Carlos de la Colina el haber compartido con nosotros un film enlace con la realidad que hoy vive México en la Cumbre de Toluca, un país tan lejos de Dios y tan cerca de Estados Unidos … y de Canadá, seamos francos, que está sacando todo el oro de nuestras minas e insiste en mantener a raya a nuestra gente con la visas de papel.
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@manouscrita
