Deficiencias. La respuesta del gobierno con la apertura de albergues para niños inmigrantes puso en evidencia deficiencias. (AP)
La crisis humanitaria provocada por el aumento de las detenciones de menores inmigrantes colocó al gobierno de Estados Unidos en una encrucijada, que dio fresca munición a los republicanos para criticar su política migratoria.
La rápida respuesta del gobierno con la apertura de albergues para niños inmigrantes en tres bases militares en Texas, California y Oklahoma puso en evidencia deficiencias y se vio rebasada por esta nueva oleada migratoria, sobre cuyo origen no parece haber un claro consenso.
Mientras el gobierno insiste que este aumento de menores que viajan solos es producto de la violencia que viven sus países de origen, los republicanos sostienen que la política migratoria de la administración del presidente Barack Obama ha generado esta oleada.
El senador republicano por Iowa, Chuck Grassley, acusó el miércoles pasado a al gobierno estadounidense de ser el responsable de que estos niños sean sometidos a esas difíciles circunstancias por falsas promesas de su política migratoria.
Grassley dijo que la decisión del DHS de renovar por dos años más el programa de acción diferida o DACA abonó a este mensaje, algo que fue rechazado por Johnson.
El gobierno de EU recibió una crítica.
Encrucijada
⇒ Señalaron su política migratoria.
⇒ La respuesta se vio rebasada por esta nueva oleada.
⇒ Este aumento es producto de la violencia que viven.