Comer puede causar diarrea.
"Me como las uñas desde chica y nunca he parado. Ahora tengo que esconder mis manos se ven horribles. Incluso, he tenido varias infecciones en la boca y heridas en los dedos", cuenta Claudia Lizama, una mujer de 36 años. Su experiencia no es aislada. El comerse las uñas mientras vemos televisión, esperamos la micro o antes de una reunión importante es un acto ansioso, descuidado, pero también puede llegar a ser una conducta compulsiva preocupante, según cuenta la psicóloga Isabel Puga Young, académica de la Universidad Central. "La boca es un sector donde tenemos muchos terminales nerviosos y por eso, llevarse las manos a la boca produce una cierta satisfacción que calma", explica.