Se defienden. Policías se cubren con escudos mientras disparan a los manifestantes para dispersarlos.
Miles de ucranianos se manifestaron en la Plaza de la Libertad de Kiev desafíando la nueva ley antiprotestas, aprobada hace unos días por el Parlamento, y que contempla penas de hasta 15 años de prisión a quien atente contra el orden público.
Desde las primeras horas de ayer domingo entre 200 mil y 300 mil manifestantes comenzaron a llegar a la céntrica Plaza de la Libertad para expresar su rechazo a la nueva legislación que restringe las manifestaciones callejeras.
La ley, aprobada por el Parlamento el jueves pasado y firmada por el presidente Viktor Yanukovich un día después, prohíbe plantones sin autorización en las plazas públicas del país y prisión de hasta 15 años para quien participe en una "violación masiva" del orden público.
Además, la nueva legislación ucraniana exige a las Organizaciones No Gubernamentales (ONG) registrarse como "agentes extranjeros" si son financiadas por grupos fuera de Ucrania, de manera similar a las leyes establecidas en Rusia el año pasado.
La manifestación de ayer domingo, la más grande registrada en lo que va de este año, fue convocada por el líder de la oposición y excampeón de box Vitaly Klitschko, quien calificó de ilegales e inconstitucionales las nuevas leyes contra las manifestaciones.
"Ucrania está más unida que nunca en su lucha contra el poder, y en su determinación a la hora de impedir la proclamación de una dictadura", afirmó Klitschko, ante los manifestantes congregados en la Plaza de la Libertad, también conocida como Maidan.
Muchos manifestantes llevaban ollas en la cabeza y máscaras, en un claro desafío y burla a la nueva legislación, que prohíbe a los manifestantes cubrirse el rostro, según reportes de la agencia informativa rusa Itar-tass.
De acuerdo con el reporte, algunos enfrentamientos entre manifestantes y las fuerzas del orden público se registraron en puntos cercanos a la Plaza de la Independencia y en los alrededores de la sede del Parlamento.
Los manifestantes atacaron a la Policía con palos mientras trataban de abrirse camino hacia el edificio del Parlamento, mientras que los uniformados lanzaron granadas aturdidoras y de humo contra la multitud.
Ucrania vive en una seria tensión desde noviembre pasado, cuando el presidente Yanukovich decidió no firmar un acuerdo con asociación con la Unión Europea (UE), desatando las mayores protestas en el país desde la Revolución Naranja de 2004.
ANALIZAN CASTIGO
La Casa Blanca culpó al gobierno de Ucrania por las crecientes tensiones en el país al no reconocer las quejas legítimas de su pueblo y amenazó con recurrir a sanciones si continúa el uso de la violencia.
La portavoz del Consejo de Seguridad Nacional, Caitlin Hayden, dijo que Estados Unidos está profundamente preocupado por la violencia en Kiev, la capital de Ucrania.