Desentraña su propia historia

El escritor Francisco Martín Moreno se ha dedicado toda su carrera a desentrañar los misterios de la historia de México. Sus verdades han despertado las críticas de los académicos, pero también lo han llevado a ser el autor más vendido del país. Libros como la trilogía de Arrebatos carnales, están por superar el millón de ejemplares, algo difícil en un país con bajos índices de lectura.

Tras dibujar el rostro humano de cientos de protagonistas de la historia de México, mostrando sus pasiones, defectos, virtudes y arrebatos, ahora la lupa certera del autor se vuelve contra sus orígenes. Y es que la confesión de su tío Klaus, enfermo terminal de cáncer y dos años de investigación dolorosa y estricta, dieron como resultado "En media hora la muerte", último libro de Martín Moreno, que desentraña el origen judío de su familia y dolor de la persecución Nazi.

El apellido de su madre Biehl, en realidad era Bielschowsky, de origen ruso judío. Su abuelo fue uno de los hombres más ricos de Alemania, y aunque su madre le negó la historia de su hermano Klaus, la terquedad del autor lo llevó a buscar sus orígenes por cielo, mar y tierra.

→ ¿Es más difícil contar la historia cuando es la propia?

Claro. Aquí hay una gran paradoja, yo me he dedicado toda mi vida a desentrañar secretos de la historia y curiosamente el gran secreto de mi familia, yo no lo sabía, sabiendo que me dedico a eso.

→ ¿Qué le dirá a los académicos si lo vuelven a criticar?

Hay dos elementos muy importantes. Me dedico a la búsqueda de la verdad, a la verdad escondida, me dedico a desentrañar mentiras, ésa es mi profesión, entonces como los mexicanos sabemos que nos han engañado, el gobierno, el clero, en la escuela, cuando sale alguien con una versión distinta y una bibliografía enorme en cada libro, para que quien piense que estoy diciendo mentiras pueda comprobarlo, no les gusta.

Por eso a los académicos que no me toman en serio y no me respetan porque dicen que soy novelista, les digo que sí. Pero tengo las fuentes, a mí me gustaría que estos historiadores que no están de acuerdo conmigo, publicaran un libro que se llamara Los embustes de Martín Moreno, es decir el que afirma está obligado a probar, pero ninguno me puede exhibir como mentiroso, como yo lo hago con muchos, a mí me gustaría que lo hicieran.

→ ¿Para escribir historia se requiere libertad?

Claro. Muchos no dicen las cosas como son porque están llenos de pasiones, envidias y rabia por no decir lo que verdaderamente quieren, porque forman parte de una academia, o tienen intereses, creados, o línea de alguien, eso los impide para hablar.

Yo no estoy impedido, yo me gano la vida escribiendo, no cobro en ningún gobierno, ni academia, ni instituto, soy más libre que un pájaro y eso no es fácil de tener.

→ ¿Cómo ha acercado a tantas personas a la historia?

Si tú ves a los líderes de la Independencia, de la Revolución, de la Conquista, o los líderes de México moderno, en términos de carne y hueso, pues a la gente le gusta. Estamos hartos de ver a Morelos sacralizado, Morelos santificado, igual que Matamoros, el Cura Hidalgo, Iturbide, Melchor Ocampo o Juárez.

Cuando los muestras al público con sus debilidades y fortalezas, la gente se encanta, porque los ve como somos todos, con toda naturalidad, sin que parezca que son súper hombres.

→ La historia de su familia es muy cruda ¿le costó trabajo escribirla?

Me costó mucho trabajo porque son pasajes que yo desconocía y créeme que me enfermé de todo, de gastritis, de infecciones respiratorias, después vinieron los insomnios, vinieron las pesadillas, pasé muy malos ratos redactando esto.

Pero cuando la acabé me di cuenta que valió la pena, porque de lo que se trata es de liberarse, por eso termino el libro diciendo: "Yo escribo, por eso no soy culpable". Te diría como el poeta: "Vida nada me debes, vida estamos en paz".

→ ¿Y está en paz?

Yo estoy en paz porque pude recuperar la voz de mis muertos, aquéllos que fueron asesinados en las cámaras de gas de Hitler, en los sótanos de las cárceles franquistas, estos malvados asesinos que fueron los franquistas al igual que los nazis.

El hecho que pudiera devolverles la voz para que pudieran protestar a 70 años del homicidio, a mí me dio gran libertad y tranquilidad, recuperar el honor de mis muertos y devolverles la palabra.

→ ¿Recuperar la historia de una persona es tan importante como recuperar la de un pueblo?

Pues claro, tienes razón. Cuando tú entiendes tus antecedentes, cuando sabes qué fue lo que le pasó a tu familia, entiendes la operación de tus genes, al conocer la historia de tus ancestros. Por ejemplo yo no sabía por qué en el fondo siempre he sido tan rebelde, soy un ingobernable y un guerrero.

Por qué soy tan intolerante con los intolerantes, bueno pues porque simplemente mi familia fue víctima de la intolerancia durante muchos años, y ahí está la respuesta. Claro que no son ciencias exactas, son ciencias sociales. Para mí fue estremecedor conocer la historia de mi familia.

→ ¿ Hablas de la participación de la iglesia católica con los dictadores?

Ahí están las evidencias, los concordatos que firma Pionono y después Pío XII con el Gobierno de Hitler, por eso le decían el papa de Hitler. Pero además firma un concordato con Franco y con Musolini, es decir que firma concordatos con los líderes fascistas del mundo, no puede alegar que no sabía del Holocausto cuando los cardenales ingleses y franceses se lo dicen, la BBC de Londres narraba todos los días lo que sucedía en los campos de exterminio de judíos, gitanos o bolcheviques, el papa volteaba a otro lado porque no quería saber de la hecatombe humana a la que ayudaba con su silencio.

Y después de esto ayuda con la Ruta de las Ratas, que fue el sistema que construyó para organizar la huida de los jerarcas Nazis al final de la Segunda Guerra Mundial, Pío XII los asiló en monasterios y conventos, pero antes les quitó buena parte del dinero que habían hecho, a cambio de salvarles la vida y conseguirles un pasaporte argentino, para llegar donde Perón que era el gran admirador de los Nazis.

→ ¿Otra verdad desentrañada e incómoda?

Claro, ésa, la relación de este papa con el fascismo latinoamericano, un papa que no tiene salvación, menos cuando supe de sus relaciones con la monja, la Madre Pascualina Lehnert, que fue su amante a lo largo de cuarenta años.

 ¿TE SEDUJO LA HISTORIA INTERNACIONAL?

A mí sí me sedujo la historia internacional, me encanta la historia, por supuesto que me sedujo porque me gusta entender. Por ejemplo ahora que estás viendo que Putin quiere meterle el guante a Ucrania, (porque vale la comparación) porque en toda la Europa del Este en este momento están aterrorizados pensando quién es el siguiente. ¿Éste es el nuevo Stalin? Lo mismo pasó en la Segunda Guerra Mundial, las grandes democracias como Inglaterra y Estados Unidos, no hicieron nada cuando Hitler bombardeaba España.

Cuando estaban firmando el tratado de Versalles que impedía tener aviones, construir submarinos o barcos, se salta todas las reglas y no le dicen nada cuando bombardea España, y no le dicen nada cuando se anexa de regreso a la Renania, ni cuando se anexa Austria y también se anexa todo lo que es la República Checa, este silencio de las potencias hizo que Hitler se creciera, a ver si ahora la Unión Europea y Obama se van a intimidar con Putin y lo van a dejar una barbarie. La historia internacional es una fuente de conocimiento para entendernos ahora.

El nuevo libro

"En media hora la muerte"; es el más reciente libro de Francisco Martín Moreno, su título está inspirado en las cárceles españolas, donde había pabellones de condenados a muerte. "Ahí metieron a dos de mis tíos por parte de mi padre. Cada día, a las siete de la mañana, llegaba un pelotón de soldados, gritaba el nombre de alguno de los presos; entre ellos se abrazaban y besaban como despedida y apoyo. Exactamente media hora después de que el pelotón abandonaba el pabellón, escuchaban las descargas de fusilamiento y el tiro de gracia. Por eso, entre los presos, decían 'en media hora la muerte'. A uno de mis tíos lo golpeaban un par de veces por semana desde el año 1939. Éste es mi tío por parte paterna, pero mi tío Klaus estuvo en el campo de concentración aquí en México, en Perote. Estuvo allí muchos años".