Dientes blancos, sonrisa perfecta

¿Quién no quiere tener una sonrisa blanca como las de los comerciales de pastas dentales? El aclaramiento dental se ha vuelto muy popular hoy en día entre jóvenes y adultos. Juan Miguel Butanda Hernández, cirujano dentista general, comenta que se ha convertido como en un sinónimo de salud, higiene y estética.

Procedimientos

Aclarar, no blanquear, es el término correcto hacia este procedimiento, ya que se van bajando varios tonos del diente poco a poco hasta llegar al que mejor le convenga al paciente. Butanda comenta que lo ideal es que el paciente no sea menor de 16 años ya que en ellos la pulpa, que es lo que provoca sensibilidad dental, es muy grande y son más propensos a sufrir hipersensibilidad; quienes tienden a realizarse aclaramiento dental vacilan entre los 18 y 40 años, en personas mayores es probable que la tonalidad del diente ya sea demasiado opaca, por lo que para obtener un buen resultado se sugieren otro tipo de procedimientos como fundas o coronas de porcelana, cubriendo por completo la pieza.

El destista señala que recientemente se ha observado un aumento entre la cantidad de personas quienes deciden realizarse un aclaramiento dental, ya que hoy en día se cuenta con más información y medios sencillos de donde obtenerla. Butanda explica que el aclaramiento que se realiza en consultorio es por medio de una lámpara que lleva un gel en color rojo (esto para determinar que se remueva perfectamente) hecho a base de peróxido de hidrógeno y se coloca sobre los dientes a diferentes concentraciones y, con dicho tratamiento, se puede llegar a lograr el tono deseado en una sola sesión de 45 minutos, dividida en tres tiempos de quince minutos cada uno. Antes de colocar el gel, se aíslan perfectamente todos los tejidos blandos como encía y mucosa de boca para dejar expuestos solamente los dientes. “Hay otros sistemas que también manejamos en consultorio pero se da el tratamiento al paciente para que lo realice en casa”, comenta el dentista. Dicho tratamiento es más lento y no se obtiene en una sola cita, sin embargo, es menos agresivo para el esmalte, ya que es paulatino y si es posible llegar al tono que el paciente desea, “el inconveniente es que es de uso nocturno y bajo la supervisión de un profesional, por lo que se tiene que estar realizando citas constantemente para observar que el aclaramiento esté funcionando correctamente”, agrega Butanda. Antes de realizar cada sesión de aclaramiento bucal se recomienda realizar con seis meses de anticipación una limpieza dental en consultorio, ya que el procedimiento debe ser llevado a cabo sobre piezas sanas que no tengan caries. Cualquiera de los dos procedimientos pueden ser utilizados, dependiendo de lo que el paciente desee y la decisión puede ser tomada con ayuda del dentista.

Sonrisa blanca por más tiempo

Dependiendo de los hábitos y edad del paciente, la duración del tratamiento puede variar y se recomienda renovarlo cada par de años siempre y cuando el paciente cumpla con los cuidados necesarios, tales como evitar sustancias que manchen los dientes, como el café, el té, alimentos muy pigmentados y hábitos como el cigarro. También algunas frutas cítricas son contraproducentes para el aclaramiento dental, ya que suelen causar mayor sensibilidad, tales como la piña, naranja, limón, etcétera, por lo que se tienen que evitar completamente durante el primer mes los productos antes mencionados y posteriormente, evitar su consumo al máximo para que perdure el resultado final. Aunque el aclaramiento dental se haya realizado en una sola cita, el color se estabiliza hasta dentro de quince días por lo que se tiene que revisar con el odontólogo el resultado obtenido. También se necesita cuidado en la ingesta de agua, ya que aquella proveniente de la llave contiene exceso de flúor, mineral que pigmenta el esmalte y las manchas ocasionadas suelen ser tan profundas que el aclaramiento no se da de manera adecuada. “El aclaramiento tiene sus limitantes”, comenta Butanda, “antes de comenzar, el odontólogo tiene que valorar y hacer un pronóstico de cuál es el resultado que se puede llegar, hay tonos que si se prestan”, agrega. La duración de unos dientes blancos dependerá de los hábitos del paciente, si no cuida todos estos detalles, es probable que regrese al consultorio por un segundo blanqueamiento en menos tiempo que quien si siga las prevenciones.

Contraindicaciones

Cualquiera dentro de la edad recomendada puede realizarse el aclaramiento dental, a excepción de quienes sufran de hipersensibilidad, es decir, tengan unos dientes muy sensibles o pacientes con restauraciones en la parte delante de los dientes, ya que las restauraciones no cambian de color; el aclaramiento actúa sobre el esmalte natural, “si hay que tomar en cuenta si hay restauraciones, primero saber cuál es el tono al que se quiere llegar para determinar si se cambian las restauraciones primero o se comienza con el aclaramiento”, comenta Butanda al respecto. Otra contraindicación que comenta el dentista es si hubiera exposiciones radiculares, caries o restauraciones mal adaptadas; el tratamiento no causa ningún prejuicio a la salud bucal del paciente, salvo provocar cierta hipersensibilidad posoperatoria que se puede controlar y regular con diversos enjuagues y pastas bucales, “también se pueden producir pequeñas laceraciones en los tejidos blandos porque si es un poco irritante, pero desaparecen en un par de días con el tratamiento adecuado”, agrega Butanda. La hipersensibilidad al momento de realizar una segunda vez el aclaramiento ya es a consideración del odontólogo, se hace una serie de preguntas para saber cuál es el estado actual del diente y ver si es conveniente hacer una segunda aplicación o si ya pudiera resultar contraproducente.

¿Consultorio u hogar?

Comercialmente, se ofrecen productos para aclaramiento dental en casa, “yo no los recomendaría” comenta el dentista al respecto, “a veces no son las concentraciones adecuadas ni las soluciones que utilizamos en consultorio, lo cual puede causar un perjuicio si no está supervisado por un profesional de la salud”, agrega. Hay algunos que si tienen la sustancia activa que se utiliza en consultorio, aunque a menores concentraciones, haciendo los resultados más lentos pero no igualan a los de un profesional. Por otro lado, existen otras que son muy nocivas e incluso pueden llegar a dejar en el diente un color traslucido, en lugar de blanco, además de causar una sensibilidad que puede ser permanente. Existen pastas blanqueadoras que aseguran dos funciones: blanquear los dientes y además brindar una salud bucal previniendo caries y otras enfermedades. “Yo no las sugeriría”, comenta Butanda, “lo ideal es que la pasta sea nada más para hacer una limpieza de boca, esa es la función principal”, agrega. La razón es porque las pastas pueden llegar a ser muy agresivas y provocar desde desgastes en las piezas hasta una hipersensibilidad. Lo mejor si se busca obtener un aclaramiento dental es consultar a un odontólogo.

Tips para después del aclaramiento dental

Cepillado tres veces al día. La manera en que se debe cepillar los dientes es después de cada alimento, cepillando por la parte de adelante los de arriba hacia abajo y los de abajo hacia arriba, llevando la encía hacia el diente y en las caras masticatorias en forma circular. Hacer lo mismo con los dientes en la parte posterior.

Apoyarse con el uso de enjuague bucal e hilo dental para complementar el aseo.

Cepillar la lengua dos veces por semana.

Reducir consumo de alimentos pigmentados.

Evitar fumar.

Acudir a revisión cada 6 meses para realizar una limpieza profunda, ya que el sarro (alimento acumulado) se calcifica por la saliva y se adhiere entre la encía y el diente, provocando el tono amarillento.