La reunión con estas dependencias “vertebrales” para el sector cafetalero es para conocer cómo implementan sus programas transversales. (ARCHIVO)
Integrantes de la Comisión Especial del Café de la Cámara de Diputados se reunieron con representantes de la Segarpa y de la Financiera Nacional de Desarrollo Agropecuario, Rural, Forestal y Pesquero para dar seguimiento al gasto público y a los programas federales de apoyo a caficultores.
Al inaugurar el encuentro, el presidente de esta instancia legislativa, Héctor Narcia Álvarez, del Partido Verde Ecologista de México (PVEM), recordó que de 2013 a 2014 el presupuesto para el programa Procafé se incrementó 100 por ciento, al pasar de 350 a 700 millones de pesos.
Sin embargo, en el Presupuesto de Egresos de la Federación 2015 se etiquetaron 730.6 millones de pesos para ello, es decir, se dio un aumento de sólo 4.37 por ciento, “proporcional con la inflación”.
Afirmó que la reunión con estas dependencias “vertebrales” para el sector cafetalero es para conocer cómo implementan sus programas transversales, ya que, en conjunto con los de otras instancias, podrían destinarse mil 521 millones de pesos adicionales a los del programa Procafé e Impulso Productivo al Café.
Por otra parte, dijo que “se requiere que las instituciones financieras hagan una inversión importante para atender las problemáticas del cultivo del café”; por ello, la inquietud de la comisión especial por fortalecer y coordinar los esfuerzos de los poderes Ejecutivo y Legislativo.
En su exposición, el director del Servicio Nacional de Sanidad, Inocuidad y Calidad Agroalimentaria de la Sagarpa, Enrique Sánchez Cruz, instó a los diputados a legislar en materia de “huertas abandonadas”, ya que esta problemática facilita el brote de epidemias que afectan a las plantaciones de café, como de la roya.
“En cada estado debe haber una legislación sobre el tema. Se los pedimos: cualquier huerta abandonada tiene que ser intervenida por ser terriblemente peligrosa, ya que constituye una fábrica de insectos y plagas”, abundó el funcionario.
Advirtió que 70 por ciento del inventario cafetalero en México tiene más de 20 años de antigüedad, lo que vuelve a las huertas vulnerables ante problemas epidemiológicos.
Sánchez Cruz dio a conocer que el Senasica implementará en 2015 una campaña informativa al respecto y para combatir el nuevo brote de roya detectado en Latinoamérica, que ya afecta a México, en especial las plantaciones cafetaleras de Chiapas, Puebla y Veracruz.
En su turno, el director general de Productividad y Desarrollo Tecnológico de la Sagarpa, Belisario Domínguez Méndez, afirmó que, para el cierre de este año, la secretaría habrá invertido dos mil 500 millones de pesos en materia cafetalera.
Asimismo, anunció la creación, para 2015, de un nuevo organismo “que le dé forma a la caficultura nacional y su cadena productiva”.
A este esfuerzo, indicó, se suma el nuevo Centro Nacional de Investigación y Desarrollo Tecnológico, además de la próxima apertura de la Universidad del Café, ambas instituciones en Veracruz, que se avocarán a preparar a los expertos que requiere el sector.
En el ámbito internacional, destacó que se impulsarán promocionales para posicionar al café mexicano en las preferencias de los consumidores de otros países.
Se congratuló de que México haya recuperado su participación en la Organización Internacional del Café, de la que actualmente es vicepresidente.
A su vez, el director general adjunto de Finanzas y Operaciones de la FND, Raúl Enrique Galindo Favela, celebró que gracias a la reforma financiera se dio el paso para modernizar y hacer sólida a la Financiera Nacional de Desarrollo, que actualmente puede tomar riesgos y otorgar créditos muy competitivos.
“No nos va a pasar lo que a Banrural, que por cada peso que prestaba, le costaba seis más, ni lo de la antigua financiera, que sólo prestaba a productores grandes para ir a la segura. Con la reforma financiera esto se equilibra”, enfatizó.
Galindo Favela recordó que entre los beneficios que otorga la FND a los productores del campo se encuentran préstamos con tasa de interés menor a 10 por ciento, mayor tiempo para saldar las deudas y privilegios para sectores pobres y mujeres campesinas.