Aunque son diversas las opiniones de ciudadanos respecto a la posibilidad de ampliar el horario para la venta de bebidas alcohólicas en Durango, éstos se inclinan ligeramente en contra de dicha medida.
Y es que si bien algunos opinan que liberar a los expendios para que ofrezcan el producto las 24 horas terminaría con el clandestinaje, otros creen que conlleva un riesgo: el incremento en el consumo.
Entre los argumentos en contra expuestos por los entrevistados, está la posibilidad de que las personas que ya consumen, lo hagan más. También creen que habría nuevos consumidores y que aspectos como el vandalismo se dispararían.
"Que tengan sus horarios porque (vender) las 24 horas es hacer más borrachos a los borrachos", opinó la madre de familia Olimpia Mera.
Y Brenda Buenrrostro, madre de familia, advirtió que incrementa también la posibilidad de accidentes.
Mientras que Armando Favela, de visita en la ciudad, consideró que aumentar el horario implicará acrecentar, en la misma medida, el número de personal policiaco para lograr control en el consumo en las calles.
En contraparte Hugo "N" sostuvo que mejoraría el control de establecimientos que venden de manera ilegal, actualmente en funcionamiento.
Rocío, una joven estudiante que no rebasa los 20 años de edad, opinó que la medida tiene puntos a favor y en contra. No obstante, se resignó a que la restricción -en lo práctico- es una pérdida de tiempo, pues quien bebe alcohol se las ingenia para conseguirlo.
