Alcaldes amenazan con irse a huelga de hambre en las oficinas centrales de Grupo México, ubicadas en Hermosillo, ante lo que llamaron la crítica situación que viven los habitantes de la región del río Sonora por la falta de cumplimiento del Fideicomiso para atender la contingencia del derrame de 40 mil metros cúbicos de sulfato de cobre acidulado por parte de Buenavista del Cobre.
Pedro Lugo López, alcalde de Aconchi, informó que los alcaldes de los siete municipios afectados se han estado reuniendo y todos tienen la misma problemática: no han fluido los recursos del Fideicomiso Río Sonora para los pagos a afectados por la agricultura, ganadería y amas de casa.
Comentó que en Aconchi 450 personas están esperando su pago y por esa razón las instalaciones del ayuntamiento estuvieron tomadas por los afectados los días viernes 28 de noviembre, lunes 1 y martes 2 de diciembre. "La presión es insostenible", dijo el munícipe.
Informó que por lo menos tres alcaldes de la región afectada por el derrame de metales tóxicos el pasado 6 de agosto, se instalarán el próximo martes 9 de diciembre en huelga de hambre, afuera de las oficinas de Grupo México.
"Ya le dieron carpetazo, no sabemos qué está pasando, el gobierno federal se ha desentendido completamente, la gente no quiere el agua de los pozos porque nunca nos han presentado un estudio donde dice que ya se puede utilizar el agua", expresó.
Lugo López dijo que hay más personas enfermas, el último caso que registró ayer es el de un niño de ocho meses.
En víspera de Nochebuena y Año Nuevo, el panorama es desolador, no hay dinero, no hay trabajo, la gente está desesperada, ni siquiera hay para comer, aseguró.
