El 17 de mayo de 1944, miércoles, mediante inserción de prensa, el club "Jaboneros de Torreón" dio a la publicidad que la siguiente serie aquí de la Liga Nacional de Beisbol Profesional, que ese año estaba en su temporada inaugural, sería en el Estadio de la Revolución contra el equipo de Saltillo, como sigue: el jueves y el sábado a las 9 de la noche y el domingo a las 4:30 de la tarde.
Los precios anunciados: $2.20 en las localidades de preferencia, $1.65 por la "entrada de sombra" y 80 centavos por la "entrada de sol". Además, decía el aviso: "Damas y niños media paga".
El primer juego de esa serie, que fue el jueves 18 de mayo, lo ganó Torreón por paliza de 9-2 con serpentina del zurdo Pancho Sosa, quien "sin haber estado en plan grande, tuvo lo suficiente para apuntarse otra victoria fácilmente" pues sólo recibió 6 hits, concedió 3 bases por bolas, golpeó a uno y ponchó a 5. Por cierto, tres de esos seis hits le fueron conectados a Sosa por el veterano Alcibiades Palma, el cubano timonel de Saltillo, quien dos años, antes, en 1942, jugó con Unión Laguna cuando el equipo de la Comarca resultó campeón de la Liga Mexicana.
(En la efeméride del próximo día 28 se hará referencia a infortunado incidente protagonizado por el zurdo Pancho Sosa).
Datos que vale la pena poner de relieve sobre estas series del beisbol profesional en Torreón hace siete décadas: Eran como ahora, de tres juegos, aunque incluían un día intermedio de descanso, que era el viernes. Los juegos nocturnos empezaban demasiado tarde, a las 9 de la noche; hoy inician hora y media antes, a las 7:30 pm. Y los dominicales eran tempraneros, a las 4:30 pm, pues ahora empiezan a las 6 de la tarde. ¿Cómo soportarían los domingos el calor lagunero de estas fechas los jugadores, cuyos uniformes se confeccionaban entonces con lana? ¿Y la afición? De ésta sólo se puede decir que su pasión por el beisbol era enorme.
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