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EL DIVÁN

El Fenómeno Selfie

Estar en redes sociales en nuestros días más que un lujo desafortunadamente se volvió una necesidad, ahí puede encontrar a su amigo de la primaria que tanto quiso o tener contacto con quien hace mucho no sabía nada de su vida, puede subir fotos, e incluso publicar que se está preparando para hacerse una suculenta cena aún y cuando a nadie le importe en lo más mínimo.

Digo que desafortunadamente por el simple hecho de que si hoy usted no quiere abrir una cuenta en facebook o estar en twitter, simple y sencillamente no existe para una gran cantidad de personas y no sólo porque tenga espíritu de grinch como este divanero, sino porque es muy probable que no se entere de las últimas noticias o si la fiesta de fulanita o manganita se cambió de sede.

No guste o no el mundo de las redes sociales existe, sin embargo como todo si es con medida es positivo, pero si es en exceso es muy probable que se caiga en adicción. Decimos éstos porque el fenómeno Selfie ha cobrado una enorme importancia en los últimos años. Este suceso consiste en tomarse una fotografía para subirla al face o twitter principalmente donde la persona sale en diferentes momentos y posiciones con un solo protagonista: uno mismo.

Recientemente un joven británico de tan sólo 19 años se llevó la cantidad nada despreciable de 9 horas en un día tomándose cerca de 100 fotografías para encontrar su mejor ángulo y "subirla" al Facebook, lo cual nos habla evidentemente de algo más que estético raya en lo enfermo.

¿Por qué los chavos estarán tan deseosos de tomarse innumerables fotografías? ¿Por qué enamorarse de su imagen? ¿Por qué sólo hablar de uno? Parece que las respuestas están dentro de las explicaciones del sabio Freud quien decía que el narcisismo era el enajenamiento o enamoramiento de nuestra imagen proyectada en el exterior, ojo, no de nosotros mismos, sino de nuestra imagen, es decir en el fondo el narcisista no se quiere, por eso adora lo que pretende ser no lo que es. Esto mi estimado lector admirador del clima bipolar de La Laguna se da desde mi humilde, a lo mejor narcisista, punto de vista que es el abandono emocional de los padres a sus hijos.

Desde luego que existirán otros factores como el cultural, el crecimiento exponencial de las mismas redes sociales, la búsqueda de identidad de los chicos, etc. Pero me parece que la escasa presencia de los padres en la vida afectiva de los adolescentes, ya sea por trabajo, situación económica, ignorancia, falta de comunicación, pocos... Más en la página 12

  Por: Lic. José Antonio Miranda Hernández

El Diván. Viene de la página 7

...recursos psicológicos o de plano desinterés han llevado a esta generación de jóvenes a vivir una doble vida (favor de no pensar en el compadre, quien lleva doble vida con su mujer y su secretaria), expresando sus deseos a través de una Tablet o un celular, pasando 6 horas diarias pegados a la pantalla de su equipo o tomando una gran cantidad de fotos que pareciera un halago al ego, pero pasa más por el reconocimiento propio de la ausencia de los demás en sus vidas.

He cierto que los tiempos han cambiado y que los padres no necesitan estar todo el día con los hijos, y también he cierto que el fenómeno Selfie no se da en chavos solamente, sino en personas maduras e incluso individuos de la tercera edad, sin embargo el grueso de este fenómeno lo componen chicos entre 15 y 25 años, y los padres coinciden con sus hijos poco tiempo y de muy mala calidad, por eso es importante tener en cuenta que es un evento que lejos de amainar, se incrementa y es un foco rojo para nuestra sociedad y nuestros jóvenes cada vez más solos y más acompañados de aparatos electrónicos, que de seres humanos cálidos e interesados.

Siempre será padre reconocerse, como joven aprender a quererse sanamente, interactuar, relacionarse, para esto existe un empujón y un acompañamiento que en un inicio y por un buen rato se da a través de los padres, lo digo como padre, no nos escudemos en que nuestros hijos son nuestros amigos, ellos harán esa labor de escoger a los suyos, nosotros somos sus padres, y padres sólo existen unos, que deberemos hacernos responsables de nuestra labor, manteniendo una sana distancia para con nuestros hijos, y no dejando dicha labor tan trascendental de educarlos a través de la nana de moda: las redes sociales.

¡¡¡Hasta la próxima!!!

A propósito le dejo mis contactos en redes sociales si gusta mandarme su selfie.

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