Hugo experimentó una desfiguración facial paulatina a lo largo de varios años en los que se siguió sometiendo a procedimientos quirúrgicos. (ESPECIAL)
Incitado por mejorar su aspecto físico, Hugo Hernández García se practicó en su juventud una serie de procedimientos estéticos que cambiarían su vida para siempre, todos ellos con el único objetivo de alcanzar una supuesta perfección.
Pero la vida le dio una dura lección a aquel joven Hugo que ahora tiene 42 años y ahora sufre las consecuencias de lo que él mismo llama 'malas decisiones', tal y como menciona para el diario Excélsior.
Allá por sus 23 años, Hernández García fue convencido de someterse a una cirugía facial y se animó a a hacerlo, sin esperar que en realidad le habían inyectado aceite de bebé en el rostro.
No obstante al incidente vivido, Hugo continuó sometiéndose a operaciones en nariz, labios, cejas, cuello y orejas, en una especie de adicción por la belleza.
Con el paso del tiempo su cara comenzó un proceso de deformación paulatino que desencadenó en una deformación total y que ahora le causan dolor, aunado a tener que soportar a lo largo de los años las humillaciones por parte de la sociedad.
El caos de Hugo Hernández ha impactado a usuarios de redes sociales, cuyo caso puede servir de lección para muchos que se obsesionan con determinados asuntos, no exclusivamente los relacionados con el físico.


