Don Goyo. Aunque las autoridades han señalado que no existe algún riesgo, recomendaron mantener precauciones, sobre todo en la zona de mayor cercanía.
En las últimas horas el sistema de monitoreo del volcán Popocatépetl registró 17 exhalaciones de baja intensidad acompañadas predominantemente de vapor de agua, gas y en ocasiones muy ligeras cantidades de ceniza.
El Centro Nacional de Prevención de Desastres (Cenapred) detalló, en su más reciente reporte, que al momento no se puede observar al volcán debido a nubosidad en la zona, sin embargo, muy temprano se observó una emisión de vapor de agua y gas con dirección noroeste.
Resaltó que el pasado 30 de julio se realizó, con apoyo de la Policía Federal, un sobrevuelo de reconocimiento del Popocatépetl, durante el cual se pudo observar los restos del cráter destruido a principios de julio y sobre los cuales se ve el pequeño domo de aproximadamente 70 metros de diámetro.
Indicó que este boquete se compara con el tamaño de algunos estadios de fútbol y edificios representativos de México que sirven como referencia para estimar las dimensiones del cráter.
Señaló que el cambio en la actividad del volcán corresponde probablemente al inicio de la destrucción del nuevo domo y es probable que en los siguientes días puedan presentarse nuevas explosiones y exhalaciones acompañadas de caída de ceniza, sin que esto represente algún riesgo. Explicó que la alerta se encuentra en color amarillo fase dos lo que significa que el volcán puede presentar pluma de vapor de agua y gas, ligera caída de ceniza en áreas cercanas, caída de fragmentos incandescentes, posibilidad de flujos piroclásticos por explosiones, por lo que se tiene que seguir monitoreando minuciosamente.
Agregó que ante dicho panorama hay restricción de acercarse a menos de 12 kilómetros del cráter, se mantienen el tránsito controlado.