La presión de los fondos que participan en el capital del Banco Mercantil del Norte de cara a la incertidumbre que se ha levantado, está obligando a que se adelante la convocatoria para una asamblea general extraordinaria de socios en la que se ratificaría o rectificaría a Guillermo Ortiz como presidente del Consejo de Administración.
La convocatoria saldrá en los próximos días para realizarse el evento en octubre próximo, incluida la discusión sobre el monto de dividendos a los accionistas en relación al año pasado.
La orden del día incluye nuevos nombramiento o ratificación de los consejeros actuales, en un escenario que engloba a siete independientes, es decir, sin participación en el capital.
Los herederos del fundador del banco, Roberto González Barrera, detentan el 10.5% de las acciones, pulverizadas en cuatro hijos y 18 nietos. El resto del capital está en la Bolsa Mexicana de Valores, con presencia importante concentrada en fondos de México, Estados Unidos y la Unión Europea.
Banorte está ubicada como el cuarto banco del sistema, aunque en algunos rubros le pelea el tercero a Santander. Al fragor del escándalo, derivado del rechazo de la Secretaría de Hacienda a avalar un documento denominado "Fortalecimiento del Gobierno Corporativo" en el que se proyectaban nuevas atribuciones del presidente del Consejo de Administración, entre ellas el remover libremente al director general, además de presidir un Comité Ejecutivo Estratégico que sesionaría sólo a petición de éste.
El documento irritó a la familia González Moreno, incluso a algunos de los consejeros independientes, quienes plantearon el caso ante la secretaría del ramo y la Comisión Nacional Bancaria y de Valores.
La presión por la salida de Ortiz, quien llegó al cargo con una participación accionaria inferior a medio punto del capital, es decir, 250 mil acciones, un año después de su salida del Banco de México, ha causado tal revuelo, que el banco se vio obligado a enviar a su director general, Alejandro Valenzuela, a aplacar el nerviosismo de los europeos que le apostaron a su acción.
La gira se inició esta semana. Antes de ello, luego de un boletín escueto sobre el asunto en que no había una definición concreta, el Banco Mercantil del Norte inició una campaña para convencer a propios y extraños de que una eventual renuncia de Guillermo Ortiz no impactaría el desarrollo de éste. En la especulación, la correduría Merrill Lynch dijo que ésta beneficiaria a los inversionistas extranjeros, aunque podría crear un distractor a corto plazo.
Las versiones hablan de que en la eventual salida del que fuera secretario de Hacienda podría llegar algún integrante de la sucesión de González Barrera.
Estamos hablando de Juan González Moreno, actual presidente del Grupo Maseca, otra de las empresas creadas por el fundador, el empresario nacido en Monterrey, o de su nieto mayor, Carlos Hank González, hijo de Graciela González Moreno y del fundador del grupo financiero Interacciones, Carlos Hank Rhon.
El hombre que heredó el nombre y los apellidos de su otro abuelo inició sus actividades como banquero justo en Banorte, para saltar a Interacciones.
En la baraja se menciona al propio Carlos Hank Rhon.
El problema, naturalmente, será convencer a los fondos de unir su voto al de la familia. Ahora que de la integración del Consejo de Administración dependerá si se queda o se va Guillermo Ortiz. La apuesta planteada por el fallecido presidente del banco era por la profesionalización en la conducción de la intermediaria, tras alcanzar un crecimiento importante que se volvió explosivo al integrar a su causa al grupo financiero Ixe. El consejo de administración del banco está integrado por 14 miembros, entre ellos Eduardo Elizondo, director de la Escuela de Graduados de la Universidad Politécnica de Nuevo León; el ex secretario de Comercio, Herminio Blanco; el ex director general de la Comisión Federal de Electricidad, Alfredo Elías Ayub; el director general del Grupo Vitro, Adrián Sada, y el presidente del consejo del grupo Alfa, Armando Garza. La ruleta está dando vueltas.
Aunque la cobertura no alcanza para el pago de multas, similares y conexos, el Grupo México de Germán Larrea Mota Velasco tiene una póliza a nombre de su filial Buenavista del Cobre que lo protege contra cualquier contingencia ambiental. La aseguradora, cuyo nombre se mantiene bajo siete llaves, pagaría los daños provocados por el derrame de 40 mil metros cúbicos de sustancias venenosas al río Bacanuchi, hasta determinada cantidad.
De ahí que el grupo esté reservando sólo 300 millones de pesos.
El emporio minero está protegido por cinco tipos de pólizas, incluida la posibilidad de desastres naturales y contingencias laborales.
BONOS POR AEROPUERTO
Aunque el Gobierno federal financiará una parte de la inversión reclamada para la construcción del nuevo aeropuerto de la Ciudad de México, por más que se instalará en terrenos del Estado de México, concretamente 78 mil millones, el resto de los 120 mil millones iniciales se reunirá en créditos.
Concretamente habrá una serie de emisiones de bonos de deuda con garantía del llamado TUA, es decir, el derecho de uso de las instalaciones que pagan los usuarios. El esquema es el que utilizaron las empresas constructoras y concesionarias de las carreteras privadas de cuota durante el sexenio del presidente Carlos Salinas de Gortari, en este caso con garantía del pago de peajes. El esquema se le conoce técnicamente como "bursatilización".
Las emisiones se van pagando conforme vayan fluyendo los recursos, por lo cual se emite la deuda en tramos.
TÉLLEZ EN LOS REFLECTORES
La sorpresa de la temporada, por más que en su larga trayectoria como funcionario público está el haber sido secretario de Energía durante el sexenio zedillista, es la inclusión de Luis Téllez como integrante del Comité Técnico del Fondo Mexicano del Petróleo.
El presidente de la Bolsa Mexicana de Valores será un consejero independiente. El hecho es que Téllez ha sido criticado severamente en su actuación al frente del organismo bursátil.
INSISTEN CAñEROS
Firme el dedo en el renglón, la Unión Nacional de Cañeros que encabeza Carlos Blackaller insiste en que la Secretaría de Economía le imponga un arancel a las exportaciones de alta fructosa procedentes de Estados Unidos, como represalia por las cuotas compensatorias que le fijó ese país al ingreso de azúcar mexicana a su frontera. Como usted sabe, la sanción por supuesto "dumping" o precio inferior al del mercado de origen le cierra las puertas a las exportaciones del dulce, justo cuando las existencias son superiores a la demanda interna.
El costo, pues, en la ley de oferta y demanda, apuntará a la baja, en un escenario en que el precio de la caña se fija en función del que tiene el azúcar en el mercado.
AHORA COREA
De prosperar las negociaciones que realiza el país, Corea del Sur podría agregarse a la larga lista de naciones con las que México mantiene Tratados de Libre Comercio.
El intercambio entre las dos economías ha sido raquítico, pese a su coincidencia en el Mecanismo de Colaboración Asia-Pacífico, conocido por sus siglas en inglés como APEC.
El año pasado el país del extremo Oriente nos vendió mercancías por sólo seis millones 130 mil dólares, en tanto nos compró otras por un millón 37 mil.
