Abandonada la cruzada panista para presionar un ajuste en el escenario fiscal del país, la estafeta la ha tomado el sector empresarial, bajo un argumento que parecería irrebatible: El nuevo escenario no ha provocado el crecimiento económico del país. Más impuestos, pues, frente a menor dinamismo en la economía.
Colocado el promedio de expectativas para este año en un mediocre 2.3 %, de acuerdo a los Criterios Generales de Política Económica, en el 2015 se llegará a 3.7, es decir la misma meta originalmente prevista para este año.
El presidente Enrique Peña Nieto presume de un salto de 5 o 6 %… para el 2017 y 2018.
El nivel, sin embargo es inferior al que registraba la economía del país en las décadas de los 60 y 70, en lo que se conoce como "el milagro mexicano". De 1970 a 76, el crecimiento promedio fue de 6.3 %.
De acuerdo al Informe sobre las Finanzas Públicas correspondiente al segundo trimestre del año, los ingresos públicos se incrementaron en 5.3 %, tantito por el impacto de los nuevos tributos y tantito por mayores ventas de Petróleos Mexicanos.
Hasta mayo la recaudación se había incrementado en 3.2 %, en un marco en que los ingresos tributarios crecieron 14.9 % y el rendimiento petrolero 56.8, por mayores ventas de gas, gasolina y diésel.
La paradoja del caso es que el crecimiento de los recursos públicos, al margen de la expectativa por el anuncio de un nuevo aeropuerto de la ciudad de México, no se ha reflejado en un mayor dinamismo del gasto.
La obra más importante de los últimos años, la refinería de Tula, se encuentra paralizada.
La obra que auguraba una inversión de siete mil millones de dólares se quedó sólo en la barda perimetral, en un escenario en que el proyecto lleva seis años en la congeladora.
Y aunque el Plan Nacional de Desarrollo plantea una inversión inédita en materia de carreteras, las licitaciones públicas fluyen a cuentagotas. Lo más rescatable hasta hoy es la terminación de la carretera México-Tuxpan… un sueño que se venía arrastrando desde el sexenio de Carlos Salinas de Gortari.
En las últimas tres décadas el crecimiento promedio anual del país fue de 2.5 %, por más que en su campaña Vicente Fox había prometido tasas superiores a 7 %… sin ofrecer la receta correspondiente.
La meta se logró… pero en el acumulado de todo el sexenio.
De acuerdo al Centro de Estudios Económicos del Sector Privado los principales factores que impiden hacer negocios en el país son la corrupción, la regulación tributaria, la ineficiencia burocrática y el ambiente de crimen y robo.
Según el organismo no se trata sólo de contar con un régimen fiscal sencillo, equitativo, sino lograr la mayor eficiencia posible en la asignación de los recursos públicos.
El reflejo más nítido del fenómeno se manifiesta en el incremento de la inversión de nacionales en el extranjero, en contraste con la caída de las apuestas al interior del país.
En lo que va del sexenio el monto de las adquisiciones de capital de empresas del exterior por parte de mexicanos alcanza más de 28 mil millones de dólares, es decir la cifra record alcanzada por el país en materia de Inversión Extranjera Directa.
Aunque a la entrega de los presupuestos de ingreso y egreso para el próximo año se reiteró que no habría más impuestos en lo que resta del sexenio, la noticia, lejos de provocar entusiasmo, redobló el activismo del Consejo Coordinador Empresarial por la eliminación de algunos tributos.
La negociación lleva ya dos semanas, aunque la posibilidad de éxito parece nula.
Más impuestos, menos crecimiento.
BALANCE GENERAL
En lo que pareciera la tónica general frente a quienes están inconformes con las reformas estructurales, el juez decimosexto de Distrito en Materia Administrativa, Ricardo Gallardo Vara, desechó una solicitud de amparo de Altos Hornos de México contra la regulación en materia de exploración y extracción de gas natural por parte de concesionarios de minas de carbón.
La empresa tiene dos minas cuyo producto se le vende a la Comisión Federal de Electricidad.
De acuerdo a la firma encabezada por Alonso Ancira, la disposición es contraria a la que marca el artículo 27 de la Constitución.
El reclamo promovido por Mineral del Norte había sido admitido originalmente, rechazándose justo una semana después.
La manzana de la discordia es un párrafo que exige a las concesionarias de minas de carbón participar en una licitación si pretenden extraer gas natural de la propia mina concesionada.
MINISTRO DEL AÑO
Ahora fue la revista "Euromoney" quien designó al secretario de Hacienda, Luis Videgaray, como ministro del año. La exposición de motivos habla de su participación activa con la construcción de reformas de largo alcance en el país.
Según la publicación, estás impulsarán el crecimiento económico del país durante los próximos años.
La percepción, empero, contrasta con la que se tiene al interior del país del funcionario, a quien se culpa de haber frenado el crecimiento el año pasado al contener el gasto público.
Los subejercicios fueron espectaculares.
PECADO DE COMTELSAT
En realidad el problema de la empresa Comtelsat, propiedad de Manuel Arroyo, no fue de incumplimiento de un contrato con Pemex Refinación, sino de la normatividad en relación con el otorgamiento de éste.
Como usted sabe, la compañía fue inhabilitada por tres meses para recibir contratos públicos por parte del órgano interno de Control de Petróleos Mexicanos.
El pecado de la firma fue no estar al corriente del pago de impuestos.
La empresa aparece en el listado de deudores del Servicio de Administración Tributaria.
Comtelsat había firmado un contrato en sociedad con Integrated Power Systems y Loadcraft.
Manuel Arroyo es uno de los siete postores en la pelea por una de las dos cadenas de televisión abierta que licita el Instituto Federal de Telecomunicaciones.
GOBIERNO BALÍN
Aunque desde 1999 al año actual México ha caído 21 escalones en el renglón de competitividad a nivel global, pasando del 39 al 61, el escándalo es mayor cuando se toca el capítulo específico de "calidad de las instituciones".
En este caso la caída es de 52 escalones.
Si en 2003 el país se ubicaba en el peldaño 50, hoy está en el 102.
El escenario habla de la falta de capacidad para promover programas y políticas idóneas.
AZÚCAR PARA ETANOL
De fracasar las negociaciones del gobierno de México con el de Estados Unidos para atenuar o desaparecer las sanciones que se le aplicaron a las exportaciones de azúcar del país por el supuesto de apuntalarse con subsidios, se prepara un plan B.
Éste apuesta a que los excedentes del dulce se destinen a la producción de etanol como oxigenante el de las gasolinas.
De hecho, Pemex tiene listo un contrato para adquirir 190 millones de litros.
Albertobarrancochavarria0@gmail.com
Barrancoalberto@prodigy.net.mx
