En la antesala de cumplirse 21 años de la puesta en escena del Tratado de Libre Comercio de América del Norte, en cuyo escenario se auguró el gran salto de México hacia un desarrollo integral, los objetivos torales planteados por el gobierno están muy lejos de haberse cubierto.
Estamos hablando de aprovechar las ventajas comparativas de México, Estados Unidos y Canadá para una producción compartida; de incrementar la competitividad en la producción de bienes y servicios en el mercado regional; de crecer las inversiones extranjeras, y de generar empleos para elevar la calidad de vida de la población.
Haga usted sus cuentas.
Aunque en una primera etapa, de 1994 al 2001, pareciera que se cumplirían los buenos augurios, por más que parecía imposible superar la marca lograda en 1980, que ubicaba a México como la octava economía del planeta, al situarse éste como la novena, el gozo se fue al pozo.
Hoy la nación está en el escalón 15.
Más allá, en el primer año de la administración foxista el país se acercó a la marca lograda en 1994, cuando México se convirtió en el cuarto destino de la inversión extranjera directa a nivel mundial, al llegar al octavo… para caer al 11 el año pasado.
Y aunque el país se ubicó en el mismo 2001 como la potencia número 12 en materia de exportación, hasta hoy no hemos podido superar la dependencia de Estados Unidos como el principal destino, lo que nos vuelve vulnerables de cara a las fluctuaciones de su economía.
El caso es que el edificio se fue desmoronando gradualmente ante la falta de políticas públicas que le dieran consistencia. Ni programas ni proyectos que permitieran aprovechar la carretera, empezando por fortalecer al mercado interno.
El balón se desinfló del 92 al 81.53 por ciento en maneras de penetración comercial al país vecino, en tanto las importaciones provenientes de éste se cayeron al 51.71 por ciento, lo que explica el tradicional superávit en la balanza comercial bilateral.
Sin consolidar, pues, el acuerdo mercantil, el país se lanzó a una alocada apertura que tampoco logró los objetivos deseados, lo que provocó la salida de más de 900 empresas maquiladoras que se desplazaron a países asiáticos y centroamericanos. En la paradoja, la importación que hacíamos de Estados Unidos migró a esas regiones. La procedente de Asía pasó de 10.92 a 31.33 por ciento entre 1993 y el 2012; la de América Central del 0.27 al 1.29.
Se fragmentó, pues, la integración comercial y de pasadita la productiva.
Más aún, México se volvió excesivamente dependiente de insumos extranjeros en el escenario de importación temporal para la exportación.
Así, el valor agregado que el país le daba a sus productos de exportación bajó de 58.8 a solo 13.13 por ciento, excluyendo al petróleo.En el 2012 de los 370 mil 918 millones de dólares producto de las exportaciones nacionales, el petróleo facturó 42 mil 837, en tanto la reexportación de productos importados temporalmente fue de 225 mil 786 millones, reduciéndose a solo 102 mil 298 el valor agregado.
En contraste, Singapur, cuya producción para los mercados externos se sustenta en la maquila, pasó durante el mismo periodo, es decir de 1993 al 2012, de un valor agregado de 47 mil millones de dólares a 228 mil.
En términos de per cápita, con una población de 5.36 millones de habitantes, la nación asiática alcanzó en el periodo un promedio de 33 mil 709, en tanto el de nuestro país fue de 992 dólares.
La generación de riqueza que pregonaba como anzuelo el TLCAN, pues, se ha reducido al mínimo.
La Comisión de la Unión Europea y el Banco Mundial le han recomendado al gobierno replantear su política de comercio exterior, complementándola con una regional, aprovechando el interés de Estados Unidos de reindustrializar al país.
Al margen de las zancadillas proteccionistas que Estados Unidos le ha colocado al país, la última con el azúcar; al margen del incumplimiento de compromisos como el de apertura al transporte de carga transfronterizo, y al margen de políticas fitosanitarias agresivas, lo cierto es que México no ha sabido, no ha podido o no ha querido aprovechar lo que planteó como la panacea.
En enero se cumplen ya 21 años de TLCAN.
BALANCE GENERAL
Lanzadas las fanfarrias al vuelo por la Asociación de Transporte Aéreo Internacional (IATA) por la caída en el precio internacional del petróleo, indexada a la de la turbosina que consumen, hete aquí que en México la relación es inexistente.El precio de combustible se mantiene intacto al paso de los vaivenes, como sucede con las gasolinas y el diésel.
Como usted sabe, la cotización de la mezcla mexicana de petróleo ha caído a la mitad del máximo de 105 dólares registrado en junio de 2012.
De acuerdo a la IATA, bajo el nuevo escenario la factura del combustible para las líneas aéreas se reducirá en 192 mil millones de dólares, en un marco en que los costos del combustible representan el 26 por ciento de los gastos de operación.
HIGA DE LA DISCORDIA
De acuerdo a los analistas, el entorno creado de cara a la empresa Higa, constructora y financiadora de la mansión en las Lomas de Chapultepec de la primera dama, Angélica Rivera, está permeando en las firmas constructoras que han obtenido contratos asociados con ésta, de cara a la posibilidad de que pudieran revocárselos.
Como se recordará del plato a la boca se le cayó la sopa a la empresa china Raiwall para la construcción y operación del ferrocarril de alta velocidad México-Querétaro, aparentemente por incluir a Higa en un consorcio que lideraba.
El martes pasado las acciones de OHL México sufrieron un descalabro de 11 por ciento en su cotización; las del Grupo ICA de 7.8, y las de Carso de 3.8.
Las tres habían integrado un consorcio con Higa para participar en la construcción del nuevo aeropuerto de la ciudad de México.
Ahora que el debate sobre una posible mano laxa en la asignación de contratos a Higa y anexas, se centra en el acueducto Monterrey VI, cuyo costo original de 17 mil millones de pesos se ha elevado a 40.
INVESTIGAN CONTRATO
Por cierto, acaba de instalarse en la Cámara de Diputados una comisión especial para investigar la licitación del tren de alta velocidad México-Querétaro, cuyo presidente es el priísta Alfredo Maldonado.
El plan de trabajo del órgano en el que participan nueve miembros, dos priístas y uno de cada fracción parlamentaria, incluida Nueva Alianza y el Verde Ecologista, será entregado hoy.
La primera fase será recopilar información de la Secretaria de Comunicaciones y Transportes.
Las tareas finalizarán el 15 de marzo del 2018.
SENADO CONTRA IFETEL
A iniciativa de los integrantes de la Comisión de Comunicaciones, el Senado interpondrá esta semana una controversia constitucional contra el Instituto Federal de Telecomunicaciones a quien se acusa de retrasar la entrada en escena de la portabilidad, es decir el derecho de los usuarios de cambiar de proveedor telefónico conservando su número.
El organismo emitió un acuerdo que alarga los plazos contemplados por la ley.
El aval para el ejercicio jurídico de cara a la Suprema Corte, es de todas las fracciones políticas.
