Alrededor de 600 de los más de 900 niños atendidos en Coahuila son dejados por sus padres en albergues públicos y privados por presentar "mala conducta", según Violeta Dávila Salinas, directora de Centros de Asistencia del sistema estatal para el Desarrollo Integral de la Familia (DIF).
La funcionaria estatal explicó que en algunos de los más de 900 casos se trata de madres solteras que no tienen quién les cuide a sus hijos cuando salen a trabajar, o ya sea porque su situacion económica no les permite mantenerlos.
No obstante, explicó, la principal razón es por que los padres no saben qué hacer ante la mala conducta de sus hijos.
Dávila Salinas informó que los albergues operan por lo general de lunes a viernes, por lo que los niños sólo los fines de semana están con sus padres, que es el caso de 600 infantes.
El resto son menores que la Procuraduría de las Niñas, Niños y la Familia (Pronnif) retiró de la familia por detectar situaciones de riesgo. Estos niños son los que están bajo resguardo de las autoridades en alguno de los albergues.
La mayoría de los menores que se encuentran en los albergues de Coahuila por motivos de mala conducta son de nivel primaria y secundaria.
