"Me juré que yo iba a ser no sólo torero, sino el mejor torero del mundo", Manolo Martínez.
El día de hoy se cumplen 18 años del fallecimiento de la figura dominante y señera del toreo contemporáneo en nuestro país, Manuel Martínez Ancira, la noticia fue una auténtica bomba, me tocó vivirla precisamente en su tierra, la consternación en el medio fue notoria. Se sabía de su precario estado de salud y la gravedad era un secreto a voces. Con su muerte se provocó un vacío en el mando de la torería, el que subsiste hasta la actualidad.
Dueño de la exaltación y del rechazo, rechazo más sustentado en su personalidad que en su sapiencia torera, con el divino don de la expectación, esa expectación que manejaba en tiempos semejantes a los de una obra maestra de la música en que las pausas y silencios entre los pases deleitaban a los tendidos. El solo hecho de ver colgado en los carteles el nombre de Manolo Martínez era motivo de polémica, desde sus seguidores hasta sus opositores entraban en fragorosa lucha expresando su gusto o disgusto por su presencia en plaza, los débiles argumentos de los detractores caían por los suelos por demostraciones de capacidad torera, como alguna vez alguien bien lo dijo "Manolo Martínez tenía un conocimiento enciclopédico de los toros", lo cierto es que seguidores y detractores abarrotaban los tendidos.
Corto y seco de habla, de reacciones directas, sin rodeos, su verbo fluía generoso en su expresión torera, provocando lo sublime en la grey de pros y contras o la gran bronca, es don Guillermo H. Cantú quien mejor lo describe tanto en su tauromaquia como en su persona en su libro "Manolo Martínez, un demonio de pasión" en el que sintetiza el mando ejercido con las siguientes palabras "No es mandón el que manda a veces, el que lo hace en una o dos ocasiones, de vez en cuando, sino aquel que siempre puede imponer las condiciones, no importa con quién o dónde se presente", palabras que sentencian, homenajean y dimensionan el difícil acto de ejercer el mando.
EFEMÉRIDES
Además del mencionado aniversario luctuoso del día de hoy del matador Manolo Martínez, el pasado miércoles 13 se cumplieron 493 años de una de las fechas de las que se tiene memoria como uno de los primeros festejos taurinos, en el día de San Hipólito, se improvisó un ruedo alrededor de la iglesia en su honor en el centro de la Ciudad de México.
LA ANÉCDOTA
Se cuenta que el matador Manolo Martínez fue aceptado como alumno de la Escuela de Agronomía por una de sus típicas respuestas, interrogado por qué quería ingresar a la escuela, se obtuvo la respuesta decidida "porque quiero ser torero", razón por la que fue admitido.
LAS FECHAS
Después del buen sabor de boca que dejó la primera novillada del domingo pasado, se encuentra todo listo para que mañana a las 5 de la tarde se dé la segunda fecha del certamen "Descubriendo un Torero" en el Coliseo Centenario, en el cartel el tlaxcalteca Óscar Amador, el regio Sergio Garza, el tapatío Saúl Vázquez y el lagunero Abraham Marín, con ganado de Arturo Gilio, Campo Hermoso y dos de Carlos Castañeda. ¡Hasta la próxima!
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